18/06/2013
07:40 h.
El número de separaciones y divorcios volvió a caer en el primer trimestre de este año con descensos que llegaron a superar el 18 por ciento, según la estadística actualizada ayer por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) que coordinan los vocales Miguel Carmona y Antonio Dorado. En concreto, el número de separaciones consensuadas cayó 18,4 por ciento durante el primer trimestre del año, cuando se presentaron 1.048 demandas menos de este tipo que en el mismo período del año anterior. Asimismo, se redujeron las rupturas sin acuerdo, con una caída interanual del 13,4 por ciento. La cifra de separaciones no consensuadas está en caída desde al menos el año 2007 con una reducción del 34,7 por ciento hasta 2012. Las estadísticas reflejan cómo trimestre a trimestre ha ido arrojando saldos negativos excepto en dos ocasiones, el primer trimestre de 2010 y el tercero de 2011, en que se produjeron aumentos del 5,5 y el 6,8 por ciento, respectivamente.
De hecho, respecto de marzo de 2013 las rupturas de este tipo se han quedado casi en la mitad: de las 1.090 del primer trimestre de 2007 a las 567 del primer trimestre de este año, aunque la cifra más baja se alcanzó el año pasado, en el tercer trimestre, cuando fueron 437 las demandas de separación sin consenso que se presentaron.
En las separaciones consensuadas, que se habían reducido un 27,7 por ciento entre 2007 y 2012, los datos del primer trimestre del año arrojan una nueva reducción, con 1.048 demandas frente a las 1.989 que se presentaron en el primer trimestre de 2007. No obstante, al igual que en los casos sin consenso, la cifra más baja de la serie estadística se alcanzó en el tercer trimestre de 2012, cuando se presentaron 884 solicitudes de separación de mutuo acuerdo.
En cuanto a los divorcios, los de mutuo acuerdo cayeron un 7,3 por ciento, hasta las 17.020 demandas, y los contenciosos, con 11.948 demandas, se contrajeron un 6,8 por ciento entre el 1 de enero y el 31 de marzo. En el acumulado desde 2007 la reducción es del 1,8 por ciento en los no consensuados y del 12,5 por ciento en los instados por consenso de las partes.
En paralelo, las nulidades matrimoniales aumentaron un 8,9 por ciento respecto al mismo período del año anterior, con 49 en todo el país frente a las 45 que se habían dictado en 2012.
Mientras se divorcia o separa cada vez menos gente, se incrementa el número de quienes renegocian las medidas acordadas cuando sellaron su ruptura, tanto las que tienen que ver con las condiciones del acuerdo propiamente dicho, como las relativas a la guardia, custodia o régimen de alimentos de hijos no matrimoniales.
De hecho, respecto de marzo de 2013 las rupturas de este tipo se han quedado casi en la mitad: de las 1.090 del primer trimestre de 2007 a las 567 del primer trimestre de este año, aunque la cifra más baja se alcanzó el año pasado, en el tercer trimestre, cuando fueron 437 las demandas de separación sin consenso que se presentaron.
En las separaciones consensuadas, que se habían reducido un 27,7 por ciento entre 2007 y 2012, los datos del primer trimestre del año arrojan una nueva reducción, con 1.048 demandas frente a las 1.989 que se presentaron en el primer trimestre de 2007. No obstante, al igual que en los casos sin consenso, la cifra más baja de la serie estadística se alcanzó en el tercer trimestre de 2012, cuando se presentaron 884 solicitudes de separación de mutuo acuerdo.
En cuanto a los divorcios, los de mutuo acuerdo cayeron un 7,3 por ciento, hasta las 17.020 demandas, y los contenciosos, con 11.948 demandas, se contrajeron un 6,8 por ciento entre el 1 de enero y el 31 de marzo. En el acumulado desde 2007 la reducción es del 1,8 por ciento en los no consensuados y del 12,5 por ciento en los instados por consenso de las partes.
En paralelo, las nulidades matrimoniales aumentaron un 8,9 por ciento respecto al mismo período del año anterior, con 49 en todo el país frente a las 45 que se habían dictado en 2012.
Mientras se divorcia o separa cada vez menos gente, se incrementa el número de quienes renegocian las medidas acordadas cuando sellaron su ruptura, tanto las que tienen que ver con las condiciones del acuerdo propiamente dicho, como las relativas a la guardia, custodia o régimen de alimentos de hijos no matrimoniales.