martes, 07 de mayo de 2024

Las espadas vuelven a estar en alto en el seno de la SGAE

Asamblea de la SGAE desarrollada el pasado año.
Menos de un año duró la paz en la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE), entidad en la que, ante la asamblea general de socios del próximo miércoles, se encuentran de nuevo las espadas en alto, con un sector que pide rechazar las cuentas del primer ejercicio de gestión de Antón Reixa. Hace un año el clima era muy diferente y la asamblea general de socios, la primera celebrada bajo la presidencia de Reixa, que entonces llevaba sólo dos meses al frente de la entidad, refrendó casi por unanimidad (un 98,53 por ciento) las cuentas correspondientes a 2011, ejercicio en el que la entidad perdió 4,6 millones de euros. La SGAE parecía unida ante las medidas de regeneración que debían afrontarse para pasar página a los acontecimientos registrados hace ahora dos años tras la detención de varios de sus exdirectivos, entre ellos Eduardo Bautista, en relación a la investigación que todavía sigue la Audiencia Nacional sobre un supuesto desvío de fondos de la entidad.

Pero desde hace unos meses la situación a cambiado: el detonante parece ser una carta que Antón Reixa envió a los socios advirtiendo de supuestas infracciones en el reparto de los derechos de televisión en relación a la llamada 'ejecución humana secundaria' con la que se conoce a 'los instrumentistas que, de forma inaudible, se adivinan en los magazines televisivos y los espacios de azar y otros servicios en las madrugadas'.


COMPOSITORES

Según el presidente de la SGAE, en la lista de compositores con mejores ingresos del año pasado aparecen en primer lugar 'una creciente nómina de autores (reales o presuntos) con nombres absolutamente desconocidos para el gran público', lo que resta ingresos a los demás socios.

Poco después, el consejo de dirección de la SGAE aprobó abrir diligencias previas informativas contra 11 socios para concretar si había infracciones que dieran lugar a incoar sanciones y acordó corregir el reglamento de reparto de los derechos que genera la música de las televisiones.

Una carta que levantó ampollas y que provocó un 'terremoto' en la entidad, empezando por su plural junta directiva, en la que hay miembros que se muestran contrarios a la iniciativa.

Las críticas suscitadas por este asunto hicieron que a principios de abril el presidente de la SGAE se sometiera a una moción de confianza que él mismo había planteado ante la junta directiva de la entidad y que superó por 27 votos a favor frente a 10 en contra y 2 abstenciones.

Desde hace diez días y calentando motores para la asamblea general del próximo miércoles, se desarrollan asambleas autonómicas en los últimos días, donde ya se escenificaron tensos debates en los que miembros de la junta directiva como José Miguel Fernández Sastrón, rival de Antón Reixa en las elecciones a la presidencia, han cuestionan la gestión y las cuentas de 2012.

También la Asociación de Compositores y Autores de Música (ACAM) criticó este balance destacando 'el descenso de la recaudación en 53 millones de euros y el encarecimiento del funcionamiento de la entidad, que pasó de 60 millones a 80 millones de euros en un año'.