viernes, 03 de mayo de 2024

La plantación de cipreses reduce el avance de los incendios

Un estudio de expertos internacionales determina que la plantación de cipreses puede servir de herramienta para reducir el avance de incendios en zonas sensibles periurbanas, donde se producen normalmente los focos, y crear pantallas para separar las zonas agrícolas y las urbanas. Así se desprende del informe de un grupo de investigadores que participan en el proyecto CypFire, coordinado por el Istituto per la Protezione delle Piante (IPP) de Florencia, centro de referencia del ciprés. Tras el incendio del pasado verano en Andilla (Valencia), el equipo de expertos tomó muestras de la parcela de cipreses, de unos 10.000 metros cuadrados de superficie, que sobrevivió al fuego y que la empresa pública Imelsa de la Diputación provincial explota como campo experimental en este municipio. 'Solo un 1,27 por ciento de los ejemplares de cipreses ardió, mientras que los árboles de otras especies de alrededor de la parcela resultaron calcinados', explica el responsable del departamento de Árboles Monumentales de Imelsa, Bernabé Moya. Como curiosidad, Moya señala que el único árbol que ardió fue un pino, de unos doce metros de altura, ubicado en el centro de la parcela.


CIPRESES LIBRES

Estos resultados se obtienen con se cipreses que crecen de forma libre, que no se podan y que tienen la rama de la variedad horizontal. Estos ejemplares crean una pantalla 'cortavientos' y no generan ramas secas, 'lo que posibilita que no haya combustible seco y ayuda a que se propague más lentamente el fuego', añade el investigador.

El ciprés mediterráneo se introdujo en España hace 2.000 años.