La asociación Societat Civil Catalana (SCC) visita esta semana por primera vez Washington para explicar su posición contraria a la independencia de Cataluña y "contrarrestar" el mensaje soberanista en la opinión pública internacional.

"La gente que estamos viendo aquí nos dice que sólo habían escuchado el otro punto de vista, los separatistas llevan la carrera muy avanzada", dijo Susana Beltrán, una de las vicepresidentas de la organización, con sede en Barcelona.

Éste es el segundo viaje internacional de la asociación antisoberanista, fundada en abril de 2014, tras la visita del pasado febrero a Bruselas para recoger uno de los premios Ciudadano Europeo 2014.

El Parlamento Europeo entrega este reconocimiento a personas u organizaciones que fomentan los valores reconocidos en la Carta de Derechos Fundamentales de la Unión Europea, como la concordia, la convivencia, el respeto y la tolerancia.

En el programa de viaje de Susana Beltrán y Juan Mellen, vocal de la entidad, en Washington hay reuniones con la comunidad española, con periodistas estadounidenses, centros de estudio y políticos.

El lunes, los dirigentes de SCC visitaron la redacción del diario "Washington Post" y también se reunieron con miembros de la American Jewish Committee (AJC), organización estadounidense decana en la defensa de los derechos de los judíos.

Asimismo, organizaron un encuentro con residentes españoles en la capital estadounidense que, en líneas generales, les comentaron que conocían más la postura de quienes quieren la independencia de Cataluña, según relató Beltrán.

SCC es una asociación privada sin ánimo de lucro que nació el 23 de abril de 2014 con el objetivo "dar voz" a los ciudadanos catalanes contrarios a la independencia de Cataluña, en el contexto del proyecto soberanista impulsado por el Gobierno catalán de la formación nacionalista Convergència i Unió (CiU) y otros grupos políticos y sociales.

"Este viaje, como todas nuestras actividades, está financiado con fondos privados. No recibimos ninguna subvención de ningún gobierno", explicó Beltrán.

La entidad cuenta con 75 socios y unos 5.000 colaboradores, y su manifiesto fundacional ha recabado alrededor de 20.000 firmas.