viernes, 26 de abril de 2024

'Mi prioridad son los emigrantes en una mala situación'

Begoña Serrano en su despacho de la Agencia Asturiana de la Emigración.
La Emigración no es un 'mundo nuevo' para Begoña Serrano, recientemente nombrada directora de la Agencia Asturiana de Emigración. Begoña Serrano atesora una experiencia de más de cinco años en el Consejo de Comunidades Asturianas, junto a su presidente Manuel Fernández de la Cera. Serrano afirma estar 'encantada' con su trabajo con la emigración, un reto que califica como 'apasionante'. Lleva dos meses al frente de la Agencia, ¿cómo encontró esta institución a su llegada?
A mi llegada encontré un equipo de personas muy implicadas y un buen programa de trabajo y dedicación a los asturianos y las asturianas que están fuera, como no podía ser menos y con una trayectoria que pienso continuar.

En los últimos tres años ha habido tres cambios en este órgano. ¿A qué es debido tanta movilidad en este órgano?
En cuanto a los cambios, como sabe, en 2008 hubo un acuerdo con otra formación política que obligó a realizar modificaciones en la estructura del Gobierno. Mi antecesora en la Agencia cesó a petición propia y por motivos personales. Los político, aunque a veces no parezca, tenemos vida personal y no siempre resulta posible hacerla compatible con nuestras obligaciones políticas.

¿Cuáles serán sus prioridades como máxima responsable de la Agencia Asturiana de Emigración?
Mis prioridades son los emigrantes de Asturias que están en una mala situación social, la atención a los asturianos que retornan y, desde luego, la colaboración con las colectividades asturianas.

¿Serán necesarios cambios debido a la crisis económica?
Condicionado por el actual contexto de crisis global, regional y local, el crecimiento del Presupuesto del Gobierno del Principado para 2010 ha experimentado un crecimiento moderado y eso ha afectado, en mayor o menor medida, al conjunto de las Consejerías. Los ajustes no creemos que afecten demasiado a nuestra población emigrante porque la reducción presupuestaria recae sobre partidas y programas que, por diversos motivos, había que replantearse.

Entre la colonia existe el temor a ver reducidas las ayudas del Principado en programas vacacionales,culturales o en el mantenimiento de los centros. ¿Van a notar algún tipo de recorte?
En la convocatoria de ayuda a las actividades de los centros asturianos el presupuesto del año 2010 es superior al año anterior, con lo que los centros no van a notar ninguna reducción, más bien al contrario. Disminuyen las subvenciones para la realización de obras en los centros que no sean estrictamente necesarias por una cuestión de emergencia.

Estamos a poco más de un año para que los asturianos residentes en el exterior sean convocados en una cita electoral. ¿Va a impulsar el Principado o su organismo algún tipo de estudio o propuesta para facilitar el voto emigrante?
Este tema no es competencia de las Comunidades Autónomas, sino del Gobierno Central. Para ello se ha creado una Comisión mixta Congreso-Senado que está estudiando este tema Y que no carece de dificultades logísticas. Si desde las Comunidades Autónomas se habla de la puesta en marcha de este mecanismo es, evidentemente, porque hay la voluntad de facilitar al máximo el voto manteniendo todas las garantías, y con esta Comisión se están poniendo las bases para hacerlo.

Muchos emigrantes aseguran sentirse como mercancía electoral, ya que consideran que, 'se les hace más caso en campaña electoral', mientras que el resto del año apenas se sienten respaldados.
En absoluto creo que esto sea así, y me cuesta creer que sea esa la percepción de los asturianos y las asturianas del exterior. La política de apoyo del gobierno, especialmente en estos últimos 10 años con la puesta en marcha de los tres Planes de Emigración, supone un gran esfuerzo año a año, no sólo presupuestario, sino también de presencia institucional allá donde nos reclaman los distintos colectivos.

¿Cómo cree que se podría hacer más partícipesa los residentes ausentes de la realidad social del Principado o de las políticas que se están poniendo en marcha para ellos?
Si por algo se han caracterizado, desde el año 1999 los distintos ejecutivos asturianos es por consolidar y potenciar fórmulas que permitieran dar continuidad en el tiempo a las políticas de emigración. Los Planes que le señalaba son prueba de ello: se prolongan cuatro años y en su ejecución están implicadas la inmensa mayoría de las Consejerías que componen el Gobierno.
Los asturianos del exterior perciben con nitidez este respaldo del Gobierno, son inteligentes y, desde luego, son capaces de discernir cuando se busca solo la inmediatez de un voto o se hace política desde el convencimiento. Saben reconocer cuando se desarrolla, como hemos hecho, un intenso trabajo, para articular acciones que no existían y que han permitido mejorar su bienestar social y también resarcirles de la nostalgia que tenían de su tierra.
En cuanto a los canales de comunicación, han mejorado de forma sustancial, siguen haciéndolo y seguiremos trabajando en esa línea.

El III Plan de Emigración de Asturias se encuentra actualmente en el ecuador de su ejecución. De hecho, se está analizando su ejecución. ¿Cree que será necesario reajustar este plan a nuevas realidades?
Estamos concluyendo la evaluación intermedia correspondiente a los dos primeros años porque así se contempla en el propio Plan. Eso nos permitirá hacer un diagnóstico de la situación y, a la vista del resultado, analizaremos y nos plantearemos si es necesario o no hacer reajustes. En definitiva de lo que se trata es de que el III Plan de Emigración del Principado cumpla con su objetivo de atender de una forma integral las demandas y las necesidades de nuestra población emigrante.

Comunidades Autónomas como Galicia o Castilla y León están apostando firmemente por atraer el retorno para equilibrar su envejecimiento demográfico con planes concretos de retorno. Asturias no cuenta con un plan propio, sino que tiene diversas medidas que competen a diversas consejerías. ¿Será necesario poner en marcha un plan propio de retorno?
No vemos necesario en este momento un plan específico de retorno, me parece que estamos atendiendo este fenómeno dentro del Plan de Emigración con medidas de atención y ayuda y que debemos seguir apostando y mejorando esta atención a los retornados.

¿La sociedad astur está preparada para acoger a hijos y nietos de sus emigrantes?
Si los hijos y nietos de nuestros emigrantes deciden retornar para vivir en Asturias, quiero recordarles que la sociedad asturiana es una sociedad abierta en todos los casos, máximo en este, ya que son asturianos y como tales la sociedad asturiana los acogerá. Y además en Asturias, la memoria histórica nos recuerda la deuda que tenemos con nuestros emigrantes.

Hablando de hijos y nietos. Piensa que los descendientes que recuperan la nacionalidad tienen como principal objetivo el retorno.
El principal objetivo de las solicitudes de recuperación de la nacionalidad pienso que está en que se sienten españoles y asturianos y quieren que eso se les reconozca, quieren participar con todos los derechos en la vida social, cultural, económica y política de un país que sienten como propio.

¿Cómo hacer que se sientan implicados con sus centros y asociaciones? ¿Están los centros condenados a desaparecer por falta de relevo generacional?
En cuanto a la implicación de hijos y nietos, en los centros asturianos, lo que yo he visto en estos últimos años desde mi trabajo en el Consejo de Comunidades Asturianas, que está muy volcado en las actividades culturales dirigidas a los jóvenes, es que se sienten fuertemente identificados con sus raíces y con todo lo que es la cultura asturiana y que la participación de los jóvenes está aumentando. Por tanto el relevo generacional no es especialmente preocupante en estos momentos, sólo hay que apoyar las inquietudes de los jóvenes.

Otra de las cuestiones que preocupan a los centros es la falta de dinero para organizar actividades. ¿Existe algún proyecto para potenciar su autofinanciación?
La autofinanciación de los Centros Asturianos es un objetivo y de hecho casi todos buscan fórmulas de autofinanciación. El Principado está subvencionando sus actividades y ayuda al mantenimiento de sus sedes sociales, con un porcentaje, como lo hace con las asociaciones culturales que están en dentro de la Comunidad Autónoma, pero no cubre el cien por cien sus gastos. Algunos centros están ensayando iniciativas novedosas, como la realización de determinadas inversiones que después se convierten en fuentes de ingresos constantes.

¿Se deberá implicar a la sociedad y las empresas asturianas con los centros?
Creo que existen muchas posibilidades y, desde luego, me parecería muy interesante, buscando las fórmulas adecuadas en cada circunstancia, la implicación de la sociedad asturiana en su conjunto.

Este año no habrá Congreso Mundial de la Asturianía, que verá retrasada su convocatoria al menos hasta el 2012. Son casi dos años sin que los emigrantes puedan llevar hasta Asturias sus preocupaciones (en una cita que se produce cada cuatro años). ¿No cree que es demasiado tiempo sin que se convoque este órgano?
En primer lugar no puedo admitir que fuera del Congreso Mundial de Asturianía no tengamos cauces de comunicación con los asturianos del exterior, tanto de forma individual como con los colectivos. Creo que la comunicación en estos momentos es muy fluida y que las inquietudes de los asturianos del exterior nos llegan sin problemas. Sería impensable que sólo cada 4 años se produjese esa comunicación.
El congreso es un foro de debate y reflexión muy útil tanto para los centros, al fin y al cabo es una reunión de representantes de Centros Asturianos, como para nosotros. Y no me consta que el Congreso Mundial de Asturianía se haya aplazado hasta el 2012, simplemente no vamos a hacerlo este año por varios motivos, no sólo presupuestarios, sino también atendiendo a conclusiones del III Congreso en las que se pedía, por ejemplo, que no coincidiera con periodo preelectoral y que se alargasen los trabajos preparatorios.