El presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, ha trasladado hoy al cónsul general de España en la Federación Rusa, Miguel Bauzá, la inquietud del sector turístico por la implantación del visado biométrico que obliga a los turistas de fuera de la Unión Europea a reflejar sus huellas digitales en los visados de entrada a los países que rigen el tratado Schengen, un aspecto que ha generado ciertas dudas en los países emisores y en los operadores del sector, como es el caso de Rusia.
El cónsul general de España, Miguel Bauzá More, explicó al jefe del Ejecutivo canario que España ha logrado que el citado visado no se implante hasta el mes de septiembre de 2015 para que no afecte a la presente temporada turística.
Este sistema -recogido desde el año 2011 en el Reglamento Schengen aunque no se han incluido hasta el momento a los países más grandes como Rusia, China e India- pretende aumentar la seguridad en los desplazamientos.
España cuenta en la actualidad con 19 centros de visados en Rusia, además de varias unidades móviles que se trasladan a diferentes zonas en donde no existen centros para facilitar los trámites. En ese sentido, Bauzá entiende que "las dificultades para los turistas son mínimas, y además es un sistema que ya está implantado a escala mundial y que, en el caso del visado español, su trámite no demora más de veinte minutos".
Igualmente, el cónsul informó que España es el país que más visados Schengen emite en la Federación Rusa con 850.000 el pasado año y que, hasta el momento, no ha recibido quejas de las autoridades rusas por la implantación de este sistema.
Por su parte, Rivero señaló que el Gobierno de Canarias sigue trabajando para intentar flexibilizar las políticas de visados hacia Canarias, dadas nuestras condiciones como Región Ultraperiférica. El jefe del Ejecutivo canario reiteró el interés del Archipiélago en "afianzar la marca Canarias en el mercado turístico ruso y consolidar nuestra posición como uno de los principales receptores del turismo ruso".
"Tenemos intensificar nuestro trabajo para recuperar a esa parte de turistas rusos que han dejado de visitar Canarias por la devaluación del rublo, la caída del precio del petróleo y la situación económica", señaló Rivero.