El Gobierno español ha aprobado la creación de un consulado en la ciudad china de Chengdú para agilizar la concesión de visados turísticos.

Se trata de evitar que los posibles viajeros chinos acaben solicitando la autorización para viajar en los consulados de otro países que tramitan visados con más agilidad.

La creación de este nuevo consulado facilitará que las oficinas ya existentes en Pekín y Cantón respondan con mayor rapidez a la demanda en el resto de sus demarcaciones.

España cuenta, además, con sendos consulados generales en las ciudades de Shanghai y Hong Kong.

Chengdú es la capital de la provincia de Sichuan, con 12 millones de habitantes, y una esfera de influencia que abarca todo el oeste de China y está considerada como la puerta de entrada a la China occidental, con una creciente implantación de empresas españolas.

La ciudad cuenta con 42 institutos y universidades y más de 600.000 estudiantes, es sede de varias industrias pilares (electrónica, productos farmacéuticos, procesamiento de alimentos, maquinaria -automotriz y aeroespacial-, petroquímica, metalurgia y materiales de construcción) y un importante sector de servicios.