26/05/2011
10:16 h.
El Ayuntamiento de Lorca y los consulados de Ecuador y Marruecos han detectado muchos casos de inmigrantes residentes en esta localidad del este español que desean regresar a su país tras los terremotos del pasado 11 de mayo. Los seísmos devastaron la ciudad de Lorca, en la provincia de Murcia, dejando nueve muertos, 300 heridos y graves daños en viviendas, infraestructuras y monumentos. A los daños materiales, que las autoridades cifran en más de 650 millones de euros (unos 910 millones de dólares), se suma el drama de los miles de damnificados que se han quedado sin casa y sin trabajo.
La concejala en funciones de Servicios Sociales de Lorca, Eulalia Ibarra, explicó que la mayor parte de los casos se han puesto de manifiesto en el campamento reunificado de refugiados de la pedanía de La Torrecilla, a ocho kilómetros de la ciudad, donde hoy han pernoctado unas 1.600 personas, en su mayor parte extranjeras.
Señaló que los agentes consulares de Ecuador y Marruecos desplazados a Lorca por los seísmos han puesto en conocimiento del Ayuntamiento que 'hay muchos inmigrantes que quieren volver a su tierra', tras haber perdido su casa y en numerosos casos su trabajo.
Los consulados han instalado en el campamento oficinas de información a sus compatriotas para ofrecer posibilidades de retorno voluntario.
El municipio de Lorca multiplicó por 12 el número de residentes extranjeros en la última década, al pasar de 1.680 extranjeros empadronados en el año 2000 a los 20.151 de 2009, lo que supone un aumento del 1.200 por ciento en 10 años, y el 22 por ciento de la población de esta localidad murciana.
Según datos del Centro Regional de Estadística de la Región (CREM), elaborados a partir del padrón municipal de habitantes y consultados por EFE, el incremento en el número de extranjeros comenzó a materializarse al principio de la década ya que en 2001 la cifra de empadronados creció en 4.753 inmigrantes respecto a 2000.
Fuentes del servicio municipal de Estadística señalaron que entre 2000 y 2009 la población mayoritaria de extranjeros residentes en Lorca es la de nacionalidad ecuatoriana, seguida de la colonia de marroquíes y de la de bolivianos.
Respecto a extranjeros continentales los principales países de procedencia son Rumanía, Bulgaria y Reino Unido, aunque en el municipio residen personas de más de 90 nacionalidades distintas.
La concejala en funciones de Servicios Sociales de Lorca, Eulalia Ibarra, explicó que la mayor parte de los casos se han puesto de manifiesto en el campamento reunificado de refugiados de la pedanía de La Torrecilla, a ocho kilómetros de la ciudad, donde hoy han pernoctado unas 1.600 personas, en su mayor parte extranjeras.
Señaló que los agentes consulares de Ecuador y Marruecos desplazados a Lorca por los seísmos han puesto en conocimiento del Ayuntamiento que 'hay muchos inmigrantes que quieren volver a su tierra', tras haber perdido su casa y en numerosos casos su trabajo.
Los consulados han instalado en el campamento oficinas de información a sus compatriotas para ofrecer posibilidades de retorno voluntario.
El municipio de Lorca multiplicó por 12 el número de residentes extranjeros en la última década, al pasar de 1.680 extranjeros empadronados en el año 2000 a los 20.151 de 2009, lo que supone un aumento del 1.200 por ciento en 10 años, y el 22 por ciento de la población de esta localidad murciana.
Según datos del Centro Regional de Estadística de la Región (CREM), elaborados a partir del padrón municipal de habitantes y consultados por EFE, el incremento en el número de extranjeros comenzó a materializarse al principio de la década ya que en 2001 la cifra de empadronados creció en 4.753 inmigrantes respecto a 2000.
Fuentes del servicio municipal de Estadística señalaron que entre 2000 y 2009 la población mayoritaria de extranjeros residentes en Lorca es la de nacionalidad ecuatoriana, seguida de la colonia de marroquíes y de la de bolivianos.
Respecto a extranjeros continentales los principales países de procedencia son Rumanía, Bulgaria y Reino Unido, aunque en el municipio residen personas de más de 90 nacionalidades distintas.