lunes, 29 de abril de 2024

En España uno de cada 10 autónomos dado de alta en el RETA ya es extranjero

Según datos del pasado mes de septiembre, los trabajadores autónomos nacidos fuera del país son ya  426.002, el 13% de todos los afiliados al régimen de trabajo por cuenta propia.

El impacto que tiene el emprendimiento en la economía de cualquier país es evidente. La historia emprendedora de España se tejió muchos siglos atrás mediante iniciativas emprendedoras que no tenían el estatus, ni denominación actual, de trabajadores autónomos o sociedades mercantiles. Se trataba de simples agrupaciones de personas e instituciones que se aliaban temporalmente para un objeto concreto con todas las características del emprendimiento de riesgo, novedad y esperanza de alta remuneración. Lo explica, en detalle, Blas Calzada, licenciado en Políticas Económicas y Comerciales, en su trabajo de investigación 'El emprendimiento en España. Una perspectiva histórica'. 

El emprendimiento hoy, no solo es importante, es imprescindible. Puesto que como indica Calzada, la capacidad  de investigación "puede aportar mucho a la innovación en la economía y al bienestar de los españoles dando cometido y esperanza a las generaciones nuevas. Hay instrumentos de financiación que pueden dar muchos más frutos de los que han dado en el pasado próximo. Solo necesitamos la energía que ponga en movimiento la capacidad de emprender", concluye. 

Y esa energía es la que aportan las personas que llegan a España procedentes de otros países: la inmigración. En los últimos dos años, se ha experimentado un incremento notable de altas, con más de 46,500 extranjeros afiliados al Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA). Según datos del pasado mes de septiembre, los trabajadores autónomos nacidos fuera del país son ya  426.002, el 13% de todos los afiliados al régimen de trabajo por cuenta propia. Respecto a esa tendencia de crecimiento que se venía experimentado en años anteriores, el último ha batido récords, acercándose a los casi 1.000 autónomos más en solo un año. Lo que pone de manifiesto la importancia que tiene ya en la economía española y previsiblemente que tendrá en los próximos años. 

Este crecimiento exponencial ha sido especialmente visible en sectores clave de la economía como la hostelería, la construcción, las actividades profesionales, científicas, o el propio transporte.

UPTA, la Asociación de Profesionales y Trabajadores Autónomos ha puesto en marcha el programa "Emprende. Integrate" en Asturias, con el apoyo de la Consejería de Derechos Sociales y Bienestar del Gobierno del Principado de Asturias. Este programa ofrece asesoramiento integral para iniciar negocios a la población extranjera interesada en el emprendimiento, independientemente de su situación legal en el Principado.

¿Qué ofrece?

Fundamentalmente, asesoramiento personalizado de apoyo al autoempleo y emprendimiento en los requisitos para constituir una actividad por cuenta propia.

Asesoramiento empresarial para la elaboración del plan de empresa.

Formas jurídicas de constitución de empresas y trámites de puesta en marcha.

Información para la inversión empresarial, creación de empleo...

Además, UPTA planea iniciar diálogos con todos los gobiernos autonómicos para desarrollar planes de autoempleo inmigrante en las diferentes comunidades autónomas en el último trimestre del año.

¿De dónde vienen los trabajadores de nuestro país? 

Casi el 70% de los trabajadores extranjeros provienen de países no pertenecientes a la Unión Europea. El número más numeroso viene de Rumanía, seguidos por los marroquíes, italianos, colombianos, venezolanos, chinos, ecuatorianos y peruanos. Además, se ha notado un aumento significativo de afiliados procedentes de Ucrania desde enero de 2022, como consecuencia del conflicto bélico que sufre el país. 

Una gran mayoría trabajan como empleados de otros y están dados de alta en el Régimen General. Sin embarbo, el15.9% ha optado por trabajar como autónomos, especialmente los chinos y los italianos. 

¿Dónde se asientan?

Casi la mitad de los trabajadores extranjeros viven en Cataluña y Madrid, les sigue Andalucía, la Comunidad Valenciana y Baleares. Pero no solo se establecen en zonas urbanas, también en las rurales hay una presencia importante de trabajadores que acceden a trabajos relacionados con el campo o el empleo en el hogar. Muchos marroquíes y rumanos encuentran  trabajan en estos sectores.