El vicesecretario general de Política Autonómica y Local del PP, Javier Arenas, propuso ayer reeditar el Pacto de Toledo para 'garantizar' el sistema público de pensiones y también para que las pensiones más bajas sean 'las que más crezcan en España' y, por ello, animó al PSOE y a los agentes sociales a tener 'responsabilidad' para alcanzar un 'acuerdo de Estado' en torno a ellas. Por su parte, el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, reclamó ayer que no se utilice la crisis como 'coartada' para iniciar una nueva reforma de pensiones en la que, advirtió, el PSOE no estará si no cuenta con el consenso de la patronal y los sindicatos. Rubalcaba aseguró que no conoce el informe de los expertos sobre el sistema de pensiones pero, en cualquier caso, no le dará su apoyo si esas recomendaciones no cuentan con el apoyo de los agentes sociales.

El líder del PSOE insistió en que el Gobierno no debe aprovechar una 'crisis puntual' del sistema provocado por la tasa de paro para plantear ajustes 'a medio plazo' porque para eso está, subrayó, el fondo de reserva.'O es que el Gobierno cree que vamos a estar mucho tiempo con 6 millones de parados?', se ha preguntado.

El portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran Lleida, dijo que su partido estudiará 'con calma' el informe de la reforma de las pensiones, ya que el 'índice' para el cálculo podría empobrecer a los actuales pensionistas. Para el portavoz de CiU, la decisión que se tome no puede ser 'técnica' ya que se trata del 'modelo de sociedad' que aspira a tener España 'a medio y largo plazo'. 'No hay que olvidar que el objetivo es evitar el riesgo de pobreza entre los mayores', indicó.

IU consideró ayer 'inaceptables y orientadas a favorecer los planes privados de pensiones como única alternativa' las conclusiones del 'supuesto grupo de expertos imparciales' nombrado por el Gobierno 'como coartada para una reedición actualizada del pensionazo'. En un comunicado, el secretario federal de Política Económica, José Antonio García Rubio, advirtió de que 'estamos ante un intento del PP de aprovechar la crisis económica para quitar derechos a los pensionistas presentes y futuros que no puedan pagarse un plan privado'.