Aurelio Miras Portugal, hizo una encendida defensa de los centros españoles, de su carácter solidario y de la necesidad de que abran las puertas a las nuevas generaciones de emigrantes para asegurar su futuro en el discurso que realizó como secretario del Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior, CGCEE, poco antes del cierre de un Pleno largo e intenso en el que las pensiones de los retornados y la supresión del voto emigrante fueron las grandes cuestiones, junto a la reforma del reglamento de los Consejos de Residentes, entidades que son el punto de enlace entre los españoles del exterior y la Administración española.

"En la diáspora véritas". Con estas palabras comenzó la intervención del director general de Migraciones, Aurelio Miras, que hizo un repaso a la historia de entidades emigrantes de 50, 80 o 150 años "que nos recuerdan que antes que nosotros hubo otros" y que sus instituciones siguen en pie "vivas, funcionando por algo que sólo tiene el pueblo español: la solidaridad y el amor por los demás". 

En este sentido destacó que los españoles pueden dar alguna lección incluso a países tradicionalmente vinculados a los derechos humanos, como Francia "donde la primera mútua de Socorros la hicieron en Béziers los españoles que fueron a plantar las cepas tras la filoxera".

El camino de vuelta de la solidaridad

Miras Portugal se mostró emocionado porque esta solidaridad de los emigrantes ha iniciado ahora un camino de vuelta, con los retornados que en pueblos de España se dedican a enseñar el idioma de los países en donde trabajaron y vivieron durante años y que "por su buen hacer son llamados por las empresas en las que trabajaron para que les envíen a españoles", eso sí, ya formados en idiomas como el alemán o el holandés, que muchos transmiten de forma desinteresada a los hijos y nietos de aquellos que se quedaron y ahora se ven obligados a "coger las maletas".

Sin embargo, el director general de Migraciones se mostró preocupado "por los mensajes que nos llegan por parte de algunos consules" en referencia al envejecimiento de las entidades gallegas. "Mantengamos vivas las entidades porque muchas prestan aún muchos servicios benéficos y sociales, luchemos porque sigan abiertas a pesar de las crisis".

El voto emigrante

El director general de Migraciones quiso aprovechar su intervención para mostrar su confianza en la reforma del voto emigrante y la supresión del voto rogado. "Creo que va por buen camino, porque independientemente de lo que diga el texto, la proposición de Ley enviada por el Parlamento galllego ha sido aprovada por unanimidad. Veo un foco muy potente que nos puede guiar en el futuro".