El Consejo de Residentes Españoles de Quito participó en el Foro Global para la Migración y el Desarrollo, celebrado en Quito del 20 al 24 de enero del presente año. Invitado a participar por Naciones Unidas, el FGMD nos sirvió para tener una perspectiva más amplia de lo que es la inmigración, conocer algunas buenas prácticas y aprender de las experiencias de la sociedad civil de diferentes países.

Nos falta mucha trabajo en inmigración para que todos los países lo traten como un derecho de las personas a la diáspora. Necesitamos muchos aliados y tener una visión más amplia e implicar a otros sectores Necesitamos construir relatos positivos de la inmigración.

Al foro asistió la delegación española encabezada por el Sr D. Carlos Abella y de Arístegui, Embajador de España en Ecuador, Sr D. José Luis Pardo Embajador en Misión Especial para Asuntos Migratorios del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación de España, Sr Da. Ma. Carmen de la Viuda Sainz Subdirectora General de Integración y Relaciones Institucionales del Ministerio de Trabajo Migraciones y Seguridad Social de España entre otros.

En los recesos tuvimos oportunidad de conversar con diferentes miembros de la delegación española.

En el encuentro con el Sr. Embajador José Luis Pardo puse de manifiesto la necesidad de que los CRE o Consejeros Generales del país donde se celebre, participen como diáspora y formen parte de la delegación Española como sociedad civil migrante, como ocurre en otros países, e informar de estos eventos al CRE y al Consejo General facilitando su presencia. En esta ocasión, por el formato del evento, ha sido posible gestionar desde el propio CRE la invitación a participar en el foro ante el Organismo de la Sociedad Civil de Naciones Unidas ante la ausencia de información e invitación por parte de las autoridades españolas.

Eso nos permite ,en un contexto más amplio, la posibilidad para la inmigración española de relacionarse con áreas Gubernamentales, diferentes diásporas de otros países y otros estamentos de la sociedad civil que serían un apoyo para realizar acciones hacia la comunidad.

El Embajador Pardo me manifestó que le parecía interesante la propuesta y la trasladaría al Ministerio. Igualmente le comenté que lo propondré en el próximo pleno del CGCEE.

En otro espacio conversé con la Sra Ma. Sagrario Salaberri Ramiro, Consejera de Trabajo Migraciones y Seguridad Social en la Embajada de España en Ecuador sobre cómo mejorar las formas de relación e intercambio de información con el CRE que le permitan a la Consejería detectar españoles en dificultades. Estudiar los protocolos de actuación e información en los Programas Asistenciales por Necesidad, involucrando a los Cónsules Generales para llegar a más personas necesitadas y sobre todo a las mujeres que con la última recesión económica en España llegaron con familias transnacionales, matrimonios que hoy están rotos y se encuentran en una situación crítica de vulnerabilidad en extrema pobreza y no pueden retornar con sus hijos dado que su situación migratoria irregular no le permite conseguir trabajar y le complica otros servicios como salud, educación y cualquier trámite con un formato sencillo.

Todo esto me llevó a la reflexión de que una madre inmigrante tiene doble dificultad para acceder a las ayudas y propuse que los Consulados les permitan la renovación de sus pasaportes o cualquier documento sin tener que pedir cita. Involucrar a Organismos locales con departamentos asistenciales, sociales y de salud encargados de expedir los certificados exigidos para constatar la veracidad de sus necesidades y que tienen que presentar en la Consejería y asumir el coste de los informes respectivos.

También sería necesario optimizar el largo viaje a Consulado y Consejería para el seguimiento de los procesos intentando que coincidan las fechas.

Voy a terminar mi mandato como Consejero atado a una agenda insatisfecha de otros periodos del Consejo (ley electoral o de nacionalidad) que ha primado como punto de discusión y hemos dejado de lado otros temas importantes. Quizá la normativa de funcionamiento o las propias narrativas del Consejo han dejado de lado a una Comisión que se debe visualizar más, como es la de género, con actores de la diáspora organizada e involucrada con los estamentos gubernamentales.

Me fui del Foro aprendiendo y feliz de que en España todos sus programas son con partidas presupuestarias y claros en sus procesos. En esto hay una gran diferencia respecto a otros Estados y es una práctica positiva para la migración.