El documental 'La encrucijada de Ángel Sanz Briz', coproducido por Aragón TV, se presentará en Barcelona este martes, 16 de junio, para inaugurar el Festival de Cine Judío de la Ciudad Condal. La cinta profundiza en la figura del diplomático aragonés y explica la estrategia que siguió para salvar del exterminio nazi a más de 5.500 judíos húngaros.

Tras su presentación en Zaragoza y Madrid, el documental llegará a Barcelona de la mano de su director, José Alejandro González, y del director del Memorial Democràtic de Catalunya, Jordi Palou-Loverdos.

La cinta, que se presentará a las 19.00 horas en el Instituto Francés, es una coproducción de Aragón TV y Encrucijada Films realizada con la colaboración del Gobierno de Aragón, la Diputación de Zaragoza y el Ayuntamiento de Zaragoza.

Ángel Sanz Briz estaba a cargo de varios negocios de España en Hungría durante la ocupación nazi del país. Perfeccionó el sistema que empezaban a utilizar algunas embajadas como Suecia, Suiza y la Nunciatura del Vaticano para salvar las vidas de los judíos húngaros y consiguió la autorización del Gobierno húngaro para que 200 judíos quedaran bajo protección española al acreditar sus raíces sefardíes.

Posteriormente Sanz Briz aumentó este número a 350 y, arriesgando su vida, su empleo y su patrimonio, multiplicó esos documentos para que tuvieran alcance familiar. De esta forma logró salvar a más de 5.500 personas, que quedaron bajo protección española aunque no tuvieran ningún tipo de vínculo con España.

Reconocimientos

Su actuación le valió años después el sobrenombre de el 'Ángel de Budapest' por parte de los sefardíes y el título de 'Justo entre las naciones' concedido en 1966 por el Museo del Holocausto Yad Vashem de Israel y entregado a título póstumo en 1989.

Este trabajo ha sido seleccionado para el programa Film.ar del Gobierno de Aragón y fue nominado en tres categorías en los Premios Simón de la Academia del Cine Aragonés: mejor largometraje, mejor guión y mejor banda sonora.

Se mostrará en distintos festivales de España y del resto del mundo, así como en el Instituto Cervantes de Budapest y también en el Museo del Holocausto Yad Vashem de Jerusalén.