Este lunes, la Audiencia Nacional juzga a un joven británico acusado por la Fiscalía de desórdenes públicos, por difundir en julio de 2022 en sus redes sociales una falsa amenaza de bomba en un avión que cubría la ruta Londres- Menorca.

Según el escrito de acusación de la Fiscalía, aunque no se solicita pena de prisión, se pide una multa de 22.500 euros y una indemnización de 95.000 euros para cubrir los gastos generados por el despliegue de un caza que escoltó el vuelo hasta su aterrizaje.

De acuerdo con la narrativa de los hechos presentada por el Ministerio Público, el 3 de julio de 2022, el acusado se encontraba en el aeropuerto de Gatwick (Londres) realizando el proceso de facturación para abordar el vuelo con destino a Menorca. En ese momento, envió un mensaje a través de la aplicación 'Snapchat' a sus amigos que viajaban con él. El mensaje incluía una fotografía suya con la frase "On my way to blow up the plane (I'm a member of the Taliban)" ("De camino a volar el avión, soy miembro de los talibanes").

La Fiscalía explica que este mensaje fue detectado por los servicios de seguridad del Reino Unido mientras el avión sobrevolaba el espacio aéreo francés, quienes alertaron a las autoridades españolas. Ante la amenaza de bomba, se decidió desplegar un Eurofighter para escoltar el vuelo. Finalmente, el avión aterrizó en el aeropuerto de Menorca a las 16.44 horas, momento en el que la Guardia Civil procedió al arresto del joven.

Según la Guardia Civil, la falsa alarma no afectó a la operatividad ni al funcionamiento normal del aeropuerto. No obstante, se optó por estacionar la aeronave en una zona apartada de la terminal y de otros aviones.