lunes, 29 de abril de 2024

Un estudio advierte de que las campañas informativas no disuaden del deseo de emigrar o incluso tienen el efecto contrario

Un estudio realizado por el centro de estudios Peace Research Institute Oslo (PRIO) revela que las campañas informativas dirigidas a disuadir la migración tienen un impacto limitado entre aquellos que desean emigrar e incluso pueden tener un efecto contrario, alentándolos a hacerlo.

Este estudio, parte del proyecto investigativo Aligning Migration Management and the Migration-Development Nexus (MIGNEX), que involucra a nueve centros de estudio de Europa, Asia y África coordinados por PRIO, se basa en entrevistas a 13.000 personas de entre 18 y 39 años en 25 enclaves de diez países africanos y asiáticos, reflejando la diversidad de los contextos de origen de la migración.

Nicolás Caso, coautor del estudio, señala que a pesar de la creciente inversión en estas campañas, se conoce poco sobre su efectividad. La Comisión Europea, por ejemplo, ha destinado más de 40 millones de euros a campañas informativas desde 2015.

El estudio examinó la exposición a la información sobre migración a través de diferentes medios, como televisión, radio, redes sociales, internet, talleres o anuncios en prensa. Además, analizó la preferencia y disposición a migrar en función de diversos factores demográficos y socioeconómicos.

Se encontró que la exposición a advertencias contra la emigración rara vez afecta las aspiraciones de migrar y, en muchos casos, se asocia con un mayor deseo de hacerlo. Solo en una zona de Somalia, la exposición a estas advertencias se relacionó con una menor aspiración a emigrar.

Los autores sugieren que esta paradoja podría explicarse porque la exposición repetida a la información sobre migración puede aumentar la conciencia de esta posibilidad o porque las personas con aspiraciones de emigrar están más atentas a este tipo de mensajes.

Además, el estudio revela que conocer a alguien que ha fracasado en su intento de migrar se asocia con una mayor aspiración a hacerlo, posiblemente debido a la disposición de las personas a asumir riesgos o a su confianza en evitar el peligro.