lunes, 29 de abril de 2024

Las comunidades autónomas como comienzo de cambios a nivel estatal: la circunscripción exterior

David Casarejos con Adrián Barbón web

El pasado martes 8 de agosto pude reunirme con el presidente de la Comunidad Autónoma de Asturias, D. Adrián Barbón, en mi rol como presidente de la Comisión de Derechos Civiles y Participación del Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior (CGCEE).

Esta es la segunda reunión que el reelegido presidente de la comunidad asturiana tiene con miembros del foro de la emigración tras una reunión hace unos meses con la presidenta de esta institución, Violeta Alonso Peláez.

Durante esta reunión y además de debatir sobre una serie de temas relevantes para la diáspora asturiana y española como puede ser la falta de fiabilidad de los números totales de emigrantes españoles, el efecto del Brexit en la ciudadanía, o el incremento de participación tras derogar el voto rogado, (y los problemas que aún perduran en el voto exterior), se tuvo como tema central la propuesta del Sr. Barbón en relación con una posible circunscripción exterior, con un escaño asignado a la población asturiana que vive fuera de España.

Antes de entrar a discutir la propuesta y la viabilidad de la misma, se recordó la labor de Begoña Serrano directora general de Emigración y Memoria Democrática, fallecida en los últimos meses, y que formó parte del CGCEE durante varios mandatos.

La propuesta que Adrián Barbón explicó hace meses pilló a todo el mundo por sorpresa y más aún a los representantes de la emigración.

Es una propuesta valiente y plasma la necesidad de representar de una mejor manera a la ciudadanía que emigró y aunque no es todo lo generosa que quisiéramos desde nuestro punto de vista, sería un cambio y un progreso respecto a lo que tenemos.

Solo un escaño representaría al más del 13% de la población asturiana que reside en el exterior y evidentemente el canje ideal debería acercarse un poco más al poder de los votos de las asturianas y asturianos sin discriminar por vivir dentro o fuera de la Comunidad Autónoma.

La representación en aquellos países de nuestro entorno que tienen un modelo de circunscripción exterior, como Italia, Francia o Portugal, es sin ninguna duda un poco más generoso que el que se propone, pero esa mejora ya podría discutirse en el futuro… Un escaño es mejor que cero. Asturias es la segunda comunidad autónoma española con mayor porcentaje de ciudadanía que reside fuera del país.

Es un cambio positivo que ha de contar con un apoyo mayoritario de los partidos políticos, y solo los partidos negacionistas de los derechos de la emigración se opondrían a una representación más justa e inclusiva.

En la reunión pude recordar el interés en la creación de la circunscripción exterior desde los comienzos del CGCEE allá por 1990, con un aluvión continuo de propuestas enviadas a la Comisión de Derechos Civiles en este sentido durante los 8 mandatos que esta institución lleva representando a la diáspora.

En el debate interno entre representantes de todo el mundo hay un consenso amplio, aunque hay muchos puntos de vista a considerar en un tema que tiene muchas aristas y muchas soluciones alternativas.

El consejero general por Alemania y miembro del Consejo de Residentes de Frankfurt, Juan González Adrados ha aportado varios puntos a considerar: “Creo que la idea de circunscripciones es buena, que haya representantes de los ciudadanos de todas partes, que defiendan los intereses específicos de cada lugar".

Pero tal cual está implementado en España, esto supone que haya muchas circunscripciones pequeñas en las que los votos no suponen una representación acorde en escaños. Por mucho que se diga que la culpa es de la Ley D'Hondt, la culpa es precisamente de no aplicar la ley D'Hondt sobre el total de los votos, sino hacer la "trampa" de aplicarla una vez se han dividido los votos en infinidad de circunscripciones, muchas de ellas con apenas un par de escaños, que siempre irán uno para cada uno de los grandes partidos y muchos votos no servirán para nada.

Además, la circunscripción se asigna por el lugar de residencia, (en los residentes en España), y muchos migrantes dentro del territorio nacional preferirían seguramente votar por su tierra natal que por la de acogida.

En el caso de Asturias, muchos residentes en la circunscripción central vienen de la oriental y de la occidental. La creación de una circunscripción exterior con un sólo diputado supondría que solamente lo obtendría el partido más votado, quedando sin representación todos los demás votos, y no sirviendo para nada los votos del exterior que no sean para uno de los grandes partidos.

Por este motivo, estoy en contra de la existencia de circunscripciones con el reparto que se hace en España y preferiría que no existieran. Además, a la hora de la verdad, los partidos políticos no ponen en las listas a personas que vayan a representar a los ciudadanos de cada provincia, pueden poner a uno de Sevilla en Almería o a uno Álava en Segovia. Y en el fondo van a representar el interés general y no el específico de la provincia.

Los residentes en el exterior tenemos la paradoja de no residir en ninguna provincia española, y al menos debemos agradecer que nos dejen elegir entre la provincia de nuestros ancestros, de nacimiento, de última residencia... algo que no pueden elegir los migrantes internos.

Así pues, estando en contra de las circunscripciones, mi postura es que mientras exista, lo razonable sería que los residentes en el exterior tuviéramos una propia, ya que no tiene sentido que a diferencia de los demás nos asignen una en la que no residimos. Eso sí, espero que tenga suficientes diputados como para que los votos supongan una representación proporcional para todos los partidos. En el caso de Asturias lamentablemente con uno sólo no será así. Sin embargo, apoyo la propuesta porque supone un precedente que nos puede permitir alcanzar el objetivo a nivel nacional”.

El consenso en esta materia en Asturias ayudaría a que más Comunidades Autónomas incluyan la circunscripción exterior en los planes futuros y quizás poder llevar esta discusión al Congreso de los Diputados. En Asturias se podría realizar este ligero cambio a través de la Ley Electoral sin necesidad de alterar el Estatuto de Autonomía.

Además de la circunscripción exterior, Adrián Barbón anunció que durante esta legislatura habrá una Dirección General de Emigración especifica y funcionará separada de la Dirección General de Memoria Democrática con lo que supone en relación con posibles recursos asignados para poder articular mejor el trabajo por la emigración.

Habiendo margen de mejora, Asturias parece que intenta mejorar la interacción entre la emigración y las instituciones de nuestro país, y esperamos que pronto haya más Comunidades Autónomas actuando de la misma manera.