El Consejo de Gobierno de Andalucía ha decidido dejar de reclamar a los profesionales médicos especializados y enfermeros extranjeros, no comunitarios, la nacionalidad para ser contratados por el Servicio Andaluz de Salud (SAS). Con esta medida, la Junta trata de paliar la escasez de personal y asegurar una atención constante en áreas de Urgencias, Atención Primaria y especialidades clave, según explicó el portavoz del Gobierno, Ramón Fernández-Pacheco.

La falta de personal especializado ha restringido la capacidad de ofrecer servicios de salud en Andalucía y en el resto del Sistema Nacional de Salud. Esta situación se agrava durante los períodos de descanso reglamentario del personal fijo, lo que obliga a tomar medidas excepcionales para atraer profesionales.

Ante la dificultad actual del SAS para cubrir puestos vitales en ciertas áreas y especialidades médicas, la Junta ha destacado "la necesidad continua de contratar personal extranjero no comunitario, una práctica recurrente en años anteriores".

Hasta el 30 de septiembre de 2023, el SAS había formalizado 1.004 nombramientos de médicos especialistas y 37 de enfermeros no comunitarios, lo que representa un aumento significativo del 33% en comparación con el año anterior.

El Gobierno andaluz considera esencial tomar estas medidas para garantizar una atención sanitaria adecuada y proteger la salud de los ciudadanos, especialmente en áreas donde no se cubren plazas debido a la falta de candidatos interesados o residentes que no eligen estas posiciones al finalizar sus estudios por considerarlas poco atractivas.En caso contrario, "la situación podría llevar a la incapacidad de mantener una atención constante en Urgencias y Atención Primaria, así como a la falta de cobertura en áreas específicas de especialización médica", explican