La presidenta de las Cortes de Castilla y León, Silvia Clemente, ha asegurado hoy que Castilla y León es una tierra de emigrantes que comprende a la emigración por lo que ha sido "capaz de crear un espacio común donde han podido integrarse identidades plurales".

Silvia Clemente ha pronunciado estas palabras en la clausura del acto de recepción a los inmigrantes y refugiados que residen en Castilla y León, a pocas horas de que mañana se celebre el Día de la Comunidad Autónoma.

La presidenta de las Cortes ha recordado que de la comunidad "salían sus ciudadanos en busca de trabajo y oportunidades hacia otras comunidades españolas y hacia otros países europeos y de América", pero ahora es "receptora de emigrantes" y "contemplamos esta nueva realidad desde una especial sensibilidad".

"Somos tierras de emigrantes y comprendemos y sentimos muy de cerca la realidad de la inmigración y la experiencia vital que comporta", ha insistido la presidenta de las Cortes, quien en su intervención ha recordado que en Castilla y León viven y trabajan 128.633 inmigrantes de 120 nacionalidades distintas.

Antes de la intervención de la presidenta de las Cortes, distintos emigrantes han dado lectura a un manifiesto en el que se recoge: "Nos sentimos no tanto inmigrantes como ya plenos ciudades en una clave de tolerancia, respeto e igualdad, hechos que nos permiten crecer como personas".

No obstante, el manifiesto se establecen una serie de reivindicaciones como una normativa que "facilite el acceso al mercado laboral de las personas inmigrantes y refugiadas que hemos decidido elegir esta comunidad como nuestra casa" y denuncian que aunque prestan una gran "cantidad de servicios" todavía hay personas que les tratan como "seres humanos de segunda clase".