La Junta de Castilla y León se reunió en Bruselas con un grupo de jóvenes emigrantes con el objetivo de crear cauces de diálogo y ofrecer colaboración para un posible retorno a España.
El secretario general de la Consejería de la Presidencia de la Junta, José Manuel Herrero, mantuvo un encuentro con 24 jóvenes castellano y leoneses y de otras regiones españolas en un bar de tapas del centro de Bruselas en el que se pretendió "abrir un contacto" con la "nueva emigración", según explicó.
"Queremos establecer cauces de contacto, tanto con los que se han ido porque han querido como con los que han salido porque no encontraban trabajo adecuado a su formación en Castilla y León", añadió.
Herrero calificó a estos jóvenes como un "activo importante" para Castilla y León, y justificó esta iniciativa de "participación" y "diálogo" como un medio de hacerles ver que su Comunidad "está ahí" para apoyarles.
La Junta desea "facilitar el retorno" a aquellos a los que no les ha quedado "otra opción" que emigrar para poder desarrollar su carrera profesional, y por ello es "importante" transmitir a estos jóvenes las medidas con las que cuenta Castilla y León para el momento "en que decidan volver".
"Queremos escuchar sus inquietudes, quejas y sugerencias mientras están fuera, y qué mejor forma de hacerlo que plantarte cara a cara con un montón de gente para que te cuente sus expectativas", agregó el secretario general de la Consejería de la Presidencia.
Una de las metas de Castilla y León es, entre otras medidas, luchar contra la problemática de la despoblación a través del retorno de emigrantes para favorecer la fijación de población.
Para ello, el Gobierno castellanoleonés quiere ayudar a los empresarios en la contratación de retornados y, al mismo tiempo, apoyar a quienes decidan volver como autónomos.
"Es fundamental dar a conocer a los empresarios de Castilla y León la cantidad de gente joven y preparada que está ahora fuera y que pueden volver con una experiencia muy enriquecedora", señaló Herrero.
Diego Lago, un gallego de 28 años, asistió a la reunión para "conocer las opciones y ayudas para volver" a España, y aunque le gustaría volver, de momento su situación personal hace que no se lo plantee.
Por su parte, Alicia Galán, joven miembro de 28 años del colectivo de emigrantes Marea Granate, asegura que no tiene expectativas de volver ya que las condiciones laborales de España "no son aceptables", y duda de que la situación en cuanto al empleo haya mejorado lo suficiente.
El secretario de la Consejería de la Presidencia mantendrá otro encuentro mañana con emigrantes de los años 60 en la sede de Hispasanté, la asociación de españoles en Bélgica para la promoción de la salud y asuntos sociales.
"Queremos conocer el proyecto de Hispasanté en persona y ver qué posibilidades tenemos de colaborar con ellos, ya que hacen una labor importante de atención social y sanitaria a gente que tuvo que salir de España y no tuvo la oportunidad de volver", concluyó Herrero.