Asturias es además la quinta en el ranking en la que más familiaas declaran poder permitirse ir de vacaciones al menos una semana al año y la sexta en la que más hogares aseguran que no se ven forzados a aplazar los pagos relacionados con su primera vivienda: gas, luz, hipoteca, alquiler, cuota de la comunidad...

Según el INE, Asturias es la séptima comunidad, de 17, con menor riesgo de pobreza y es la sexta con mayores ingresos medios anuales netos por habitante (11.251 euros, frente a un promedio nacional de 10.391), superada por País Vasco, Navarra, Madrid, Cataluña y Aragón.

Los datos del INE ponen de manifiesto una vez más la existencia de dos Españas: la del Norte, en mejores condiciones de renta y menor riesgo de pobreza, y la del Sur, más deprimida y con una situación más adversa y vulnerable frente a la crisis económica.

El análisis refleja a su vez que Asturias está en una situación atípica porque la renta media o riqueza disfrutada es superior al promedio del país y el ingreso medio anual neto por persona supera en Asturias en el 8,27% al promedio nacional, pese a que la riqueza generada (PIB por habitante) está 10,74 puntos porcentuales por debajo de la media, según datos del INE en marzo y de Eurostat el jueves pasado.

Esta disparidad (un PIB por habitante menor que el promedio y una renta personal superior) refleja el alto nivel relativo de los salarios (en parte, atribuible a la composición sectorial predominante en la estructura productiva asturiana), los flujos y transferencias hacia Asturias desde el resto de España por los mecanismos de reequilibrio y de solidaridad, y el alto nivel promedio de las pensiones asturianas (1.047 euros frente a 885 de media nacional), lo que se suma al elevado número de pensionistas, lo que convierte a Asturias en la región en la que la diferencia entre las cotizaciones aportadas a la caja única de la Seguridad Social y las prestaciones percibidas de ella arroja un mayor déficit: 2.128 millones de euros anuales.

Según la encuesta que fue realizada por el INE en la primavera de 2014, el ingreso medio de los hogares españoles ha seguido bajando, año tras año, durante la crisis y en 2013 se situó, como promedio, en 26.154 euros, el 5,74% menos que cuando comenzó la actual legislatura y el 2,3% inferior al de un año antes. Con este deterioro de los ingresos familiares, el riesgo de pobreza también sigue aumentando en España pese a que la cifra considerada como umbral para que el ciudadano pase a ser considerado en ese peligro se ha rebajado en proporción a la caída general de las rentas. En 2014, se hallaban en España en riesgo de pobreza el 22,2% de la población, 1,8 puntos porcentuales por encima de un año antes, cuando estaban en esta posición el 20,4%.