viernes, 29 de marzo de 2024

Treinta días para pactar la investidura y todo sigue igual

GRAF6117 MADRID, 18/7/2019.- El presidente el Gobierno español en funciones, Pedro Sánchez, durante una entrevista con la Sexta TV en la que insistió este jueves en rechazar la entrada en el Ejecutivo de Pablo Iglesias, líder de la coalición izquierdista Unidas Podemos (UP).El líder socialista español reconoció que la presencia de Iglesias en el Gobierno es el "principal escollo" para lograr el apoyo de UP de cara al proceso de investidura que comenzará el próximo lunes, día 22, en el Congreso de los Diputados. EFE/Pool Moncloa/Borja Puig de la Bellacasa.
El presidente el Gobierno español en funciones, Pedro Sánchez. EFE/Pool Moncloa/Borja Puig de la Bellacasa.
A un mes de que se cumpla el plazo para una nueva investidura, las posiciones de los partidos no se mueven, el PSOE descarta el cogobierno, Podemos exige que se reconsidere su propuesta y el calendario de encuentros con colectivos sociales y otras fuerzas políticas arranca la próxima semana, última de agosto.

Este jueves, el presidente en funciones, Pedro Sánchez, ha retomado la actividad pública con una visita a Gran Canaria en la que ha hecho declaraciones sobre el compromiso del Estado con los damnificados por el incendio y la cooperación entre administraciones pero ha eludido pronunciarse sobre la actual situación política o la propuesta de Podemos.

Tras el viaje a Canarias, la siguiente actividad pública en su agenda pasa al domingo cuando participará en Biarritz (Francia) en la cena oficial de la cumbre del G7 tras presidir el viernes del Consejo de Ministros.

Queda pendiente la reunión con el presidente del PNV, Andoni Ortuzar, que en principio estaba fijada para principios de esta semana y que, de momento, no tiene fecha aunque Sánchez podría aprovechar el viaje a Biarritz para contactar con los nacionalistas vascos.

La próxima semana sí está previsto que Sánchez finalice las reuniones con los colectivos sociales y arranque el calendario de encuentros con fuerzas políticas a quienes trasladará su acuerdo programático para construir un gobierno progresista.

Este jueves, la vicesecretaria de Política Social del PP, Cuca Gamarra, ha reprochado al Gobierno en funciones que no haga nada para negociar y ha asegurado que sólo busca "repartir culpas" de un escenario de repetición electoral que "ya ha elegido" porque cree que "puede obtener un mejor resultado".

En opinión de Gamarra, Sánchez "no ha hecho los deberes ni en primera ni en segunda convocatoria" para configurar un Gobierno, por lo que el PP piensa que lo que quiere son unas nuevas elecciones.

A estas declaraciones, el ministro del Interior en funciones, Fernando Grande-Marlaska, ha contestado que el PSOE "no quiere elecciones" y está trabajando por la formación de un "Gobierno progresista con un programa progresista".

El Partido Socialista está trabajando "seriamente para que haya un nuevo Gobierno, progresista con un programa progresista" que este mes "está enriqueciendo el presidente, Pedro Sánchez, con reuniones que está manteniendo con la sociedad civil", ha indicado.

Sentarse a negociar con los socialistas es lo que espera Unidas Podemos, además de otra respuesta "más elaborada" a la propuesta programática remitida al PSOE el pasado martes.

La portavoz de Galicia En Común, Yolanda Díaz, que forma parte del equipo negociador de Unidas Podemos, ha instado a Sánchez a "explicar los motivos por los que no quiere sentarse a negociar cuando dicen que Podemos es el socio preferente".

"Desde Galicia en Común ponemos toda nuestra disponibilidad para desbloquear la situación política del país", ha dicho Díaz en un mensaje en Twitter.

También ha afirmado que Galicia en Común no se verá con Sánchez por separado: "No busquen divisiones de forma torticera".

En la misma línea, la portavoz adjunta de Unidas Podemos en el Congreso, Ione Belarra, ha explicado en RNE que la propuesta trasladada a los socialistas merece un análisis más exhaustivo por parte del PSOE.

Belarra ha dicho que es el momento de "dejar atrás los reproches" y ha pedido que no se espere al "último minuto" para negociar.