sábado, 20 de abril de 2024

OURENSANOS EN REINO UNIDO

Reino Unido: "O virus está fóra de control"

Londres Trafalgar Square web
Londres. Un solitario barrendero en Trafalgar Square

El Reino Unido vive sus peores momentos desde el inicio la pandemia. La detección de la nueva variante del virus ha puesto en jaque a los servicios sanitarios británicos, por lo que este martes entraron en el segundo confinamiento domiciliario nacional. "Os hospitais están saturados e vivimos unha situación moi mala, pode que peor que en primavera", cuenta Antía Quintas, una ourensana residente en Londres. 

En la jornada de ayer registraron un nuevo récord de contagios con 62.322 casos y 1.041 fallecidos, unas cifras que no se contabilizaban desde el pasado mes de abril. "Estamos nun punto no que hai máis xente que da positivo que negativo", reflexiona. Los hospitales tampoco atraviesan su mejor momento, con una ocupación superior a la de la primera ola del virus. Este lunes, los centros sanitarios británicos contaban 30.451 pacientes covid ingresados, muy por encima del pico máximo de 21.684 del 12 de abril. "A sensación que temos é de que te contaxias aínda que tomes todas as precaucións", asegura Quintas.

Además del confinamiento domiciliario para toda la población,  las autoridades sanitarias están llevando a cabo otras medidas que les permitan conocer la incidencia del virus. Quintas es una de las seleccionadas, por lo que un test llegará a su casa para que pueda autodiagnosticarse. Con esta decisión se muestra "contenta", cree que le permitirá sentirse "algo máis tranquila".

Simón Iglesias, británico con raíces ourensanas que vive en Farnborough, cuenta cómo se encuentra ahora esta ciudad de Hampshire: "Está todo cerrado, es como un pueblo fantasma". Desde su perspectiva, la situación actual "está peor que en primavera" y concuerda con Quintas en que "todos conocemos ya alguien que tiene o pasó el covid".

Un “choque brutal"

Pese a la gravedad de la situación que atraviesa Reino Unido, las mascarillas siguen sin ser obligatorias en las calles, reservándolas a los espacios cerrados y al transporte público. Esta es una de las cuestiones que más impacta a los ourensanos del Reino Unido cuando vienen a España. "Para min foi un choque ver que aquí todo o mundo as emprega", recuerda Sonia Gómez, quien vive en Sheffield y se encuentra en la provincia desde el mes de noviembre. De esto aún guarda una anécdota porque, acostumbrada a vivir en un país donde no es tan estricto su uso, salió del coche sin ponérsela hasta que se encontró con otras personas: "Non me daba conta ata que os vin a todos con elas", confiesa.

Quintas considera que el mensaje que transmite el Gobierno británico es "erróneo", ya que siguen sin incidir en la importancia del uso de la mascarilla. "Como non é obligatorio, non a levan e na rúa un tamén se contaxia", señala. Eso sí, el ambiente ya no es el mismo. Su vuelta a Galicia fue el 11 de diciembre, antes de que se conociese esta nueva variante del virus, y en su regreso el 29 se encontró con todos los cambios. "O ambiente está como triste, parece que se están a dar conta da gravidade da situación".

Las medidas de prevención son "menos estrictas" según la perspectiva de Patricia Álvarez, ourensana que reside en Derby, en cuanto a las mascarillas. Esto, unido a la tasa de contagios de la variante, afectan al aumento de casos que llevaron a un nuevo confinamiento. "Agora non podes tomar algo en ningún sitio, pero podes quedar para dar un paseo con outras persoas sen usar máscara", explica.

Vuelos en duda

Las conexiones con el resto de los países continúan generando dudas entre los ourensanos residentes en el Reino Unido. En el caso de Sonia Gómez, esperará a ver la evolución para decirdirse. "O meu marido iba vir pasar aquí o Nadal, pero canceláronlle o voo. Agora corres ese risco, pero tamén de ter que comprar un billete moi por enriba do seu prezo ao que se lle suman as PCR que tes que facer",explica. Patricia Álvarez, quien tiene que viajar a Ourense en las próximas semanas, acaba de conocer que su vuelo está cancelado y no sabe qué ocurrirá.