sábado, 20 de abril de 2024

EDUARDO DIZY, PRESIDENTE DEL CONSEJO GENERAL DE LA CIUDADANÍA ESPAÑOLA EN EL EXTERIOR

Eduardo Dizy, (CGCEE): "Se venía de una dinámica más o menos aceptable, en lo que se refiere a los asuntos y reivindicaciones de los emigrantes, y hemos pasado al inmovilismo y oscurantismo total"

Eduardo Dizy web
Eduardo Dizy, presidente del Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior

¿Qué balance hace de este aciago 2020?

Desde mi punto de vista y experiencia personal, el balance es negativo. A pesar de que conservar la salud y la vida es positivo, así como la de los seres queridos, de todos modos, me entristece profundamente la pérdida de tantas vidas y también, el cierre de tantas empresas o pequeños negocios familiares que han arrojado a millones de familias al desamparo y la pobreza en todo el mundo. Sinceramente, ante la tragedia de la pandemia y sus consecuencias, para mí, pesa más lo negativo.

¿En qué situación se encuentra la colectividad en los países donde hay una mayor presencia de emigrantes españoles?

Creo que, a nivel general, la situación no es buena en la mayoría de los países, aunque se tienen que diferenciar las circunstancias entre los tipos de países y continentes. Es muy diferente la realidad que se vive en Europa en general, en Australia, en Estados Unidos o Canadá, de la que se vive en países de Hispanoamérica, como en México, donde resido, por poner un ejemplo que conozco mejor. Nada tiene que ver entre unos y otros la sanidad, la economía, la seguridad, los niveles de pobreza, la corrupción, etc. Aquí, la colectividad española sufre mucho por la extorsión, el secuestro, la inseguridad y, en general, se ha empobrecido mucho por la situación caótica del país y por la desaparición de una gran parte de la clase media emprendedora y trabajadora que, ya de por sí, era muy reducida en comparación a los más de 120 millones de habitantes que tiene México. De igual manera se podrían nombrar un sinfín de países como Venezuela, Nicaragua, Cuba, Honduras, El Salvador, Bolivia, Ecuador, Argentina, etc., donde la situación es similar o, en algunos casos, peor que aquí.      

Como presidente del CGCEE, ¿cómo vive la falta de acción y de avances por parte del Gobierno de España y el inmovilismo de los últimos años?

Pues lo vivo con mucha preocupación, indignación y frustración, y creo que se puede agregar algún sentimiento o emoción negativa más. Desde que asumí el cargo en junio de 2013 hasta hoy, he sido testigo del deterioro que ha sufrido el Consejo General con los diferentes Gobiernos, en el transcurso de todos estos años. Se venía de una dinámica más o menos aceptable, en lo que se refiere a los asuntos y reivindicaciones de los emigrantes y sus descendientes, y hemos pasado al inmovilismo y oscurantismo prácticamente total.

¿En qué ámbitos entiende que no puede pasar más tiempo sin que se tomen decisiones, se avance, y se progrese hacia el logro de las reivindicaciones de la emigración española?

Creo que es vergonzoso y deleznable, para la clase política y parlamentaria, que nos hayan impuesto el voto rogado, nos hayan suprimido el voto municipal (ADN del emigrante), que hayan dividido y diferenciado a muchas familias con una deficiente ley de nacionalidad, mal denominada de memoria histórica y que, en definitiva, no se haya avanzado nada en estas legítimas reivindicaciones. Obviamente, no quieren ni oír hablar de la representación parlamentaria de la emigración, que en otros países más democráticos existe y que nos abriría otra perspectiva muy diferente. 

Y que quienes ahora ostentan el poder político y legislativo han demostrado no tener un ápice de empatía con la emigración, que tanto le ha dado y le sigue dando a nuestro país, sin prácticamente nada a cambio, al no haber solucionado ni una de las anteriores reivindicaciones.

¿Qué acciones o medidas propone para recuperar el tiempo perdido, después de dos años sin Plenos del CGCEE, con el mandato de los CRES a punto de finalizar y sin propuestas de fechas por parte del Gobierno?

La primera y única medida sería la prolongación del VII Mandato del CGCEE, dándole así el tiempo necesario para cerrarlo con la celebración de todos los Plenos que obliga el RD 230/2008, en su Art. 16.2, y que no se han realizado por las políticas marcadas en el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, así como del Gobierno pasado y el actual.

¿Qué objetivos se pone para 2021?

El objetivo principal es la conservación de la salud de todos los españoles en el exterior, y no poner en riesgo su integridad física hasta que haya un porcentaje de vacunación mundial que garantice una normalidad sanitaria. A partir de ahí, ya se podrán celebrar procesos electorales a CRE y CGCEE, así como también retomar las reuniones presenciales, tan necesarias, para darle un poco de visibilidad al Consejo General, hasta que pueda evolucionar en otro formato diferente porque el actual está agotado, creo yo.

Dizy con partidos políticos web

Eduardo Dizy en un Pleno del CGCEE con los representantes de los partidos políticos