21/05/2020
13:55 h.
Las autoridades de Camboya levantaron la orden que desde mediados de marzo impedía la entrada en el país a los viajeros de España, Italia, Reino Unido, Irán, Francia y Estados Unidos debido a la COVID-19.
La nueva orden publicada este miércoles por el Ministerio de Salud impone sin embargo a todos los viajeros que lleguen al país, un certificado de que han dado negativo en la prueba de la COVID-19 emitido en las 72 horas anteriores y un seguro médico con una cobertura mínima de 50.000 dólares.
Además, a pesar del levantamiento de las restricciones de viaje en Camboya, la mayoría de los vuelos internacionales están cancelados en el Sudeste Asiático, principalmente los procedentes de Europa y Estados Unidos, con restricciones de viaje en todos los países.
En la página web del aeropuerto de Nom Pen se puede ver la llegada y salida de dos vuelos internacionales hacia y desde varias ciudades de China y Corea del Sur.
Camboya, que ha detectado 122 casos de la COVID-19 y ningún muerto, solo prohibió la entrada de los seis países mencionados y no ha impuesto medidas estrictas de cuarentena, aunque sí el cierre de colegios, museos, bares y otro tipo de negocios.
Con más de 72.000 casos registrados y por encima de los 2.200 muertos, la mayoría de los países en el Sudeste Asiático han comenzado a levantar las restricciones por el nuevo coronavirus, pero los viajes internacionales siguen muy limitados.
En Tailandia, están prohibidas la llegada y salida de los vuelos internacionales al menos hasta el 31 de junio, mientras que el tránsito internacional aéreo es muy limitado en los aeropuertos de Indonesia y Malasia.
Filipinas anunció que relajará las restricciones a algunos vuelos internacionales a partir del 1 de junio y Singapur permitirá el tránsito de pasajeros internacionales a partir del 2 de junio.
No obstante, la entrada de viajeros extranjeros está prohibida, con algunas excepciones, en países como Singapur, Indonesia y Malasia, mientras que en Tailandia se permite la entrada de extranjeros con una prueba de la COVID-19 y seguro médico.
Solamente vuelos especiales, como los humanitarios o militares, están permitidos de momento en Tailandia.
La nueva orden publicada este miércoles por el Ministerio de Salud impone sin embargo a todos los viajeros que lleguen al país, un certificado de que han dado negativo en la prueba de la COVID-19 emitido en las 72 horas anteriores y un seguro médico con una cobertura mínima de 50.000 dólares.
Además, a pesar del levantamiento de las restricciones de viaje en Camboya, la mayoría de los vuelos internacionales están cancelados en el Sudeste Asiático, principalmente los procedentes de Europa y Estados Unidos, con restricciones de viaje en todos los países.
En la página web del aeropuerto de Nom Pen se puede ver la llegada y salida de dos vuelos internacionales hacia y desde varias ciudades de China y Corea del Sur.
Camboya, que ha detectado 122 casos de la COVID-19 y ningún muerto, solo prohibió la entrada de los seis países mencionados y no ha impuesto medidas estrictas de cuarentena, aunque sí el cierre de colegios, museos, bares y otro tipo de negocios.
Con más de 72.000 casos registrados y por encima de los 2.200 muertos, la mayoría de los países en el Sudeste Asiático han comenzado a levantar las restricciones por el nuevo coronavirus, pero los viajes internacionales siguen muy limitados.
En Tailandia, están prohibidas la llegada y salida de los vuelos internacionales al menos hasta el 31 de junio, mientras que el tránsito internacional aéreo es muy limitado en los aeropuertos de Indonesia y Malasia.
Filipinas anunció que relajará las restricciones a algunos vuelos internacionales a partir del 1 de junio y Singapur permitirá el tránsito de pasajeros internacionales a partir del 2 de junio.
No obstante, la entrada de viajeros extranjeros está prohibida, con algunas excepciones, en países como Singapur, Indonesia y Malasia, mientras que en Tailandia se permite la entrada de extranjeros con una prueba de la COVID-19 y seguro médico.
Solamente vuelos especiales, como los humanitarios o militares, están permitidos de momento en Tailandia.