jueves, 25 de abril de 2024

EL ARQUITECTO JESÚS ARSENIO DÍAZ PRESENTÓ LA OBRA EN LA CASA DE GALICIA DE MADRID

"El contubernio de Lisboa", un thriller en clave de humor para entender los años sesenta

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Público asistente a la presentación de "El contubernio de Lisboa".

“Este libro nació con la pretensión de ser una obra seria, sensata y prudente... pero, como la cabra tira al monte, se fue configurando como una caricatura esperpéntica de lo que fue la sociedad española pequeño-burguesa de la segunda mitad del siglo XX”. Con estas palabras definió el arquitecto y escritor coruñés Jesús Arsenio Díaz, “El contubernio de Lisboa” en la presentación de la obra en la delegación de la Xunta en Madrid, Casa de Galicia.

En el acto, al que acudieron cerca de un centenar de personas -entre ellas los diputados Juan de Dios Ruano y Guillermo Collarte-, intervinieron también el coordinador de Actividades de la Casa Ramón Jiménez; el escritor y crítico literario Vicente Araguas; y el editor Basilio Rodríguez Cañada.

Para Jiménez, la novela es, citando al catedrático de Literatura Comparada de la Universidade da Coruña y escritor José María Paz Gago en el prólogo, “una deslumbrante e inclasificable obra” y en la que según su análisis literario “desfilan por sus páginas todos los registros humorísticos”.

Para el editor Rodríguez Cañada, “con esta novela se consolida un autor con firme vocación literaria que todavía ha de ofrecernos nuevos frutos de su genio creativo, pues ya está enfrascado en El contubernio de Sambarandán”.

Para Araguas, Jesús Arsenio Díaz tiene ese punto elegante, como de pantalón de franela inglesa, y blazer, coronada la testa con una gorra veneciana (un suponer), al que le va pintiparada la retranca, que no el sarcasmo”.

Por su parte el autor, aunque la novela esté en clave de humor señala que su intención es la de dar fe de una sociedad, “hacer de fedatario de una realidad nacional, que se muestra trágica, dramática, cómica o mágica, según el momento y según las tierras por donde discurre la acción (Castilla, Madrid, Lisboa o Galicia)”. También resaltó algunos aspectos, entre ellos los guiños al Quijote, al encabezar cada capítulo con epígrafes que sirven como “una verdadera y eficaz guía de lectura” para ayudar al lector a no perderse ya que hay muchos personajes y a veces la trama es compleja.