sábado, 20 de abril de 2024

Paquita Merchán, adiós a una luchadora

Paquita Merchán en un acto organizado por la colectividad española de París.
La colectividad española en París acudió al entierro de un personaje histórico de la colonia, que todos han coincidido en calificar como 'una mujer que quería que se valorase el movimiento asociativo' y que 'no tenía miedo a nada ni a nadie'. Llovía en París. Las calles adoquinadas del cementerio Père Lachaise veían desfilar a docenas de españoles camino del crematorio. En este sábado 6 de febrero, más de un centenar de amigos, compañeros y responsables asociativos querían rendir un último homenaje a Francisca Merchán Tejero. Paquita. Todos la llamábamos Paquita. La Presidenta de Honor de la Federación de Asociaciones y Centros de Emigrantes Españoles en Francia (FACEEF) era querida por todos. Nunca he encontrado, en 20 años de periodismo asociativo, a nadie que hubiese hablado mal de ella. Todos destacaban su sonrisa. Una sonrisa perenne, que no abandonaba sus labios�?� ni en los momentos más difíciles.
Paquita conoció el sufrimiento. Su vida no fue un camino de rosas. Luchó desde su más tierna infancia. Con 11 años ya trabajaba en el Madrid de inicio de los años 30. Nacida en el seno de una familia numerosa, su padre, obrero afiliado a UGT, fue para ella un ejemplo. Cuando estalló la Guerra Civil, con 16 años, lo dejó todo y, con sus compañeros libertarios, corrió a buscar armas para defender la joven República.

'El 18 de julio me fui de casa y volví tres meses más tarde', contaba en una conversación con el periodista francés Patrick Pepin. En estos años de adolescencia quemada por la guerra, Paquita era una rebelde que defendía la República con ardor desde el frente.

'La Mascota', así la llamaban sus compañeros de la Columna Rosal, de la que era la única mujer. Ese ardor nunca se convirtió en resignación, ni siquiera cuando el 29 de marzo de 1939 dejaba Madrid camino de Valencia y luego de Alicante a la busqueda de barcos que nunca llegaron. Sí, Paquita conoció los días trágicos de abril de 1939 en Alicante. En el puerto de esta ciudad mediterránea 15.000 personas quedaron atrapadas en una ratonera. Paquita conoció el infierno de tres días y tres noches en los que hombres, mujeres y niños morían. Tres días en los que uno se preguntaba ¿Dónde está la compasión, dónde está la humanidad?

Rafael Torres describió lo ocurrido en ese puerto en su obra 'Los náufragos del Stanbrook'. Paquita lo vivió. Desde la fuerza de sus convicciones, y de sus 19 años, la joven Paquita decide volver a Madrid. Allí, una parte de su familia, se niega a recibirla por miedo y los otros la avisan de que la están buscando y que debe escapar. Viaja a Sevilla donde continúa trabajando en la clandestinidad pero será denunciada y tendrá que volver a escapar. De vuelta a Madrid será detenida y pasará dos meses y medio en Gobernación. Con 20 años será encarcelada en la prisión de las Ventas donde pasará tres años.

Sin miedo
Paquita Merchán no tenía miedo. Lo dicen los amigos y compañeros que desfilan frente a su ataúd. En el descansa una luchadora. La bandera republicana cubre el féretro. Muchos, con las lágrimas en los ojos, depositan un beso mientras levantan el puño. Porque Paquita nunca se ha dejado vencer por la melancolía ni por la resignación. Por eso, en 1948, con 28 años, abandona España y se refugia en Francia. Aquí, en este país, continuará con la lucha. Dejará el anarquismo y militará en el Partido Comunista de España.

José Pamiés, camarada del PCE recordará en esta bella ceremonia de adiós la fuerza de sus convicciones. También lo hará Ramón Santamaría, responsable del PCE en Francia. Suenan los acordes de la guitarra de Paco de Lucía, 'Entre dos aguas' título significativo�?� Paquita navegaba entre su amor por España y Francia. Entre la lucha sindical, política y asociativa. Entre el mirar siempre hacia adelante y el no olvidar el pasado. Su lucha asociativa fue siempre tan importante como sus convicciones políticas. Era una mujer que quería se valorase el movimiento asociativo por lo que de superación del hombre supone en su labor por el conjunto.

Proyectos
Desde la Faceef luchó por que la federación trabajase en proyectos para la recuperación de la memoria histórica cuando ésta aún no había llegado al vocabulario de los políticos. Del coloquio que presidió sobre la aportación de los republicanos españoles a la democracia en Francia surgió el libro �??Memorias del Olvido�?�. Paquita siempre ha estado dispuesta a ofrecer su testimonio para dar cuenta de lo que una guerra supone. Luchadora incansable, defensora de la paz y la justicia, lo era también de los derechos de la mujer. Así lo recuerda María Amparo Martínez, compañera de la Faceef. 'Siempre me ha sorprendido su lucidez, hasta el último momento ha estado luchando'.

Paquita era un diamante de muchas caras. Era también una mujer de letras. Le gustaba la poesía, había leído a los autores españoles y le gustaba coger la pluma. Con las lagrimas en los ojos Sylvia y Oscar nos leen, ante ella, una de sus poesías: 'Cantera inagotable, el dolor de mi pueblo, cantado, mil y mil veces, por labios extranjeros. Qué no daría yo, porque esa piedra, de miseria arrastrada, por cinco continentes. Pudiera ser un rayito de sol, en la noche de los que luchan, por abrazarte libertad'. Suenan ahora las �??coplas a la defensa de Madrid�??.

Antonio Aliaga no es sólo el presidente de la Faceef. Es un amigo, un compañero de luchas. �?l quiere recordar la huella de Paquita en el movimiento asociativo. Quiere que sepamos que su trabajo ha inspirado a muchos responsables asociativos. Quiere que su recuerdo sea un revulsivo para todos los que pudiesen dejarse ganar por el desaliento. 'Su fuerza es nuestra fuerza, sus luchas son las nuestras'.

Seguimos desfilando en este homenaje fúnebre. El silencio grita en esta sala demasiado pequeña para tanta gente que quiere decirle adiós. Sus cenizas han sido dispersadas en el Jardín de los Recuerdos. Su recuerdo sigue vivo. Su trabajo, que es también el de tantos miles de españoles, seguirá vivo. Paquita Merchán, 28 años de lucha en España, 62 años de lucha en Francia, 90 años luchando por los españoles.

Adjetivos a Paquita
María A. Martínez
(Faceef)'La defensa de los derechos de la mujer, y en especial los de la mujer emigrante, debe mucho al tesón con el que siempre ha trabajado. La pasión nunca ha faltado en ella'.

Gabriel Gaso
(Faceef y Vicepresidente de la Casa de España) 'Generosidad, altruismo, fortaleza de convicciones, abnegación, perseverancia. Faltan los adjetivos para definirla. Para ella el trabajo asociativo era primordial y siempre luchó porque fuese reconocido'.

Antonio Aliaga
(Presidente de la Faceef) 'Su influencia en nuestro trabajo no desaparece con ella. La Faceef le debe mucho y el recuerdo de su acción estará siempre presente'.

Carlos Bujidos
(Presidente de Espamedia) 'Recordaré su sonrisa, su buen humor, era una mujer que se hacía querer fácilmente'.

José María Oliver
(Presidente de la Confederación APFERF) 'Siempre trabajo para los demás, en defensa de un ideal y de convicciones profundas. Le debemos el respeto que merece el trabajo de toda una vida'.

Pedro Pelegri
(Presidente de la Casa Regional Valenciana) 'Con ella siempre encontrabas soluciones para todo. Era positiva'.

José Pamiés
(PCE en Francia) 'Su compromiso ha sido siempre sincero y hoy he perdido a una camarada y una gran amiga'.