Tras muchos días de angustia, en la tarde de ayer aterrizaban en Torrejón de Ardoz a bordo de un Airbus 330 del Ejército del Aire los 139 hispanopalestinos y sus familiares, 67 de ellos menores evacuados de la Franja de Gaza.
El ministro de Asuntos Exteriores en funciones, José Manuel Albares, y la ministra de Defensa en funciones, Margarita Robles, que los recibieron a pie de pista, también respiraban tranquilos por haber conseguido completar con éxito una operación "compleja porque se requería las autorizaciones del Gobierno de Israel y del Gobierno de Egipto", ha explicado Albares, que ha aprovechado para destacar igualmente "la extraordinaria colaboración de Qatar para que haya sido posible".
Por su parte, Margarita Robles ha destacado la emotividad del momento. "Entre los evacuados hay muchos niños que "van a tener aquí una nueva vida".
Entre el contingente viajaban, también 27 efectivos que forman parte del 45 Grupo, el Escuadrón de Apoyo al Despliegue Aéreo (EADA) y la Unidad Médica de Aeroevacuación, mientras que la operación ha estado dirigida desde el Mando de Operaciones del Estado Mayor de la Defensa.
El alivio por estar salvo después del horror vivido en el último mes era evidente, pero también el dolor por lo que dejan atrás. "Cuando quieres sonreír te recuerdas que lo que has dejado detrás", explica a los periodistas Salah Awad El Sousi, coordinador de la colonia española en Gaza, que admite que "es un sentimiento raro que no había sentido nunca, alegre y triste a la vez".
También Natalia Abu Jarad, de 26 años, admite su alivio por haber salido de Gaza donde "la situación está fatal" y tuvo que cambiar seis veces de casa antes de marcharse. "Tengo muchísima pena porque tengo mis primas, mis amigas, la familia de mi marido... todos todavía están allá", añade, subrayando que no sabe si su casa sigue aún en pie o ha quedado destruida por los bombardeos.
Su padre, Nafez Abu Jarad se muestra contento de haber llegado. "Para mí España es la primera patria", subraya, contando que incluso hizo la 'mili' y se muestra muy agradecido de la acogida que se les está dando y de la postura que ha adoptado España en este conflicto.