viernes, 19 de abril de 2024

Borrell achaca al PP que no se pueda suprimir a tiempo el voto rogado

Agencia EFE

El ministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, ha responsabilizado a la oposición y, en particular, al PP, de que la reforma para suprimir el voto rogado de los españoles residentes en el extranjero no se pueda tramitar a tiempo en las Cortes Generales para que entre en vigor en los comicios del 28 de abril.

Borrell ha opinado que la reforma pactada por el PSOE y Unidos Podemos en el Congreso es "sensata, positiva y constructiva" y hubiera supuesto un estímulo para incrementar la participación de los emigrantes.

El ministro se ha referido a este asunto en la sesión de control en el Senado en respuesta a la pregunta formulada por el senador socialista Antidio Fagúndez sobre si el Ejecutivo considera preciso suprimir el voto rogado.

Esta fórmula obliga a quienes viven en el extranjero a comunicar personalmente su voluntad de ejercer su derecho de sufragio como paso previo a entregar sus papeletas.

Antes de su entrada en vigor en las elecciones autonómicas de mayo de 2011, la participación de los inscritos en el Censo Electoral de Residentes Ausentes (CERA) rondaba el 30 por ciento, mientras que con el voto rogado, ha bajado al 6 por ciento.

"No se puede considerar un éxito", ha admitido Borrell ante la fuerte caída en la participación.

Ha lamentado que no haya habido un acuerdo de todos los grupos, "en particular la oposición del PP ha hecho que esta reforma no se pueda tramitar en tiempo y forma".

A juicio de Borrell, los españoles que viven en el exterior deben tener "la misma posibilidad" de participar en las elecciones que los residentes en el país.

Con la reforma planteada por el PSOE y Unidos Podemos, se hubiera podido volver "como mínimo" a tasas de participación anteriores a 2011.

Propiciar que en una papeleta en blanco los españoles residentes en el exterior elijan la lista al Congreso o candidato al Senado, que dispongan de plazos más flexibles para ello, que cuenten con más puntos a los que acudir para depositar el voto en urna y un mayor control de los sufragios, también si se hace por correo, son algunos de los ejes del acuerdo que alcanzaron PSOE y Unidos Podemos.

La toma en consideración de esta propuesta se debatirá la próxima semana en el pleno del Congreso, pero aunque se apruebe, no dará tiempo a completar su tramitación antes de la disolución de las Cortes el 5 de marzo debido al adelanto de las elecciones generales.

Borrell se ha comprometido a seguir trabajando para que en próximas citas electorales haya una nueva norma que facilite el voto de los emigrantes, que ha recordado que ha crecido notablemente en los últimos años debido a las nacionalidades concedidas y a los españoles que han tenido que salir de España por la crisis.

Fagúndez también ha culpado al PP y a "sus socios de la derecha" de "bloquear" la tramitación de la ley e impedir que vea la luz.