Concepción M. Moreno - Agencia EFE

Argentina es "un país que tiene mucho que enseñar a España en materia de memoria", porque su sociedad ha decidido "no olvidar" y "condenar el terrorismo de estado", afirma la ministra española de Igualdad, Irene Montero, en una conversación con EFE durante su visita a Argentina.

Retratos en blanco y negro de integrantes de Madres de Plaza de Mayo, como Taty Almeida -cuyo hijo, Alejandro Almeida, desapareció en 1978- o Sara Rus -madre de Daniel Lázaro, ausente desde 1977-, otean esta entrevista, que tiene lugar en uno de los edificios de la antigua Escuela Militar de la Armada, hoy Espacio Memoria y Derechos Humanos.

En la otrora ESMA, uno de los lugares más siniestros de la última dictadura argentina (1976-1983), Montero mantuvo un encuentro "muy especial" dentro de la intensa agenda que ha desarrollado desde el miércoles en Buenos Aires, al reunirse con varias de esas mujeres que, en las fotografías, muestran orgullosas su legendario pañuelo blanco.

"Yo creo que la derecha española tiene mucho que aprender de las Madres de Plaza de Mayo y la capacidad de memoria y respeto a los derechos humanos del pueblo argentino y su capacidad para construir verdad, justicia, repetición y no repetición", comenta la ministra de Igualdad a raíz de esa reunión.

En su opinión, Argentina "es un país que tiene mucho que enseñarle a España en materia de memoria, es un ejemplo", porque su pueblo ha decidido "no olvidar, condenar el terrorismo de estado, las desapariciones forzadas, la perdida de muchísimos militantes por la democracia y por la libertad en una estrategia planificada por el estado".

Por ese motivo, defiende la Ley de Memoria Democrática de su país, impulsada por el Gobierno de coalición de izquierdas que preside el socialista Pedro Sánchez y puesta en vigor en octubre pasado, dentro de lo que califica de "responsabilidad" de la sociedad para conservar la "memoria colectiva".

Al mismo tiempo, explica que las críticas que la derecha española ha vertido sobre esa norma tienen que ver con que esta "siempre ha defendido la ausencia de memoria como una estrategia para sostener la impunidad de los criminales franquistas".

"Para que esos crímenes no se vuelvan a repetir, es necesaria la memoria", insiste.

INTENSA AGENDA

Montero cierra este viernes su visita a Argentina y parte rumbo a Colombia, después de casi tres días de intensa actividad, que incluyó la XV Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe, organizada por la Cepal y ONU Mujeres, y reuniones con autoridades del Ejecutivo local.

La ministra española de Igualdad fue recibida este miércoles en la Casa Rosada (sede de Gobierno) por el presidente de Argentina, Alberto Fernández, de quien resalta que, "como el presidente Sánchez, han entendido que el feminismo tiene que formar parte de la centralidad de las agendas de gobierno".

De "verdadero honor" califica el encuentro en el Senado con la vicepresidenta, Cristina Fernández, que también tuvo lugar este miércoles.

"Uno de los ejes de nuestro trabajo está en denunciar la violencia política que no para de crecer contra las mujeres feministas que hacemos política y que hacemos políticas para transformar", destaca Montero, quien dice que el atentado perpetrado contra Fernández el 1 de septiembre está relacionado con "ser una mujer que está trabajando para transformar su país".

Acerca de su intervención en el foro regional que también concluye este viernes en Buenos Aires, la titular española de Igualdad pone de relieve la necesidad de compartir experiencias y aprendizajes entre los movimientos feministas de todos los países.

"Nunca como ahora en mucho tiempo la agenda feminista había estado en el centro de la agenda institucional (...) y eso se debe al empuje imparable de millones de mujeres" en todo el mundo, indica Montero, quien recuerda que España tiene normas pioneras como la Ley de Protección Integral contra la Violencia de Género (2004) o la de Garantía Integral de la Libertad Sexual (2022) -conocida como "ley del solo sí es sí"-.

En ese sentido, resalta que Europa debe aprender mucho de la "agenda que Latinoamérica y el Caribe están impulsando" acerca del "reconocimiento del derecho al cuidado" que, en su opinión, tiene que derivar en la adopción de políticas públicas que permitan "repartir la riqueza, repartir el tiempo, repartir los cuidados".

"Las mujeres necesitamos tiempo para vivir", resume.