jueves, 28 de marzo de 2024

Caos en Italia para hacer los test a quienes regresan de otros países

Aeroporto Fiumicino (Italy), 04/06/2020.- Travellers arrive at the 'Leonardo Da Vinci' Rome Airport (Fiumicino), on the second day of the reopening of interegional travel by plane, in Rome, Italy, 04 June 2020. Several countries around the world have started to ease COVID-19 lock-down restrictions in an effort to restart their economies and help people in their daily routines after the outbreak of coronavirus pandemic. (Abierto, Italia, Roma) EFE/EPA/TELENEWS
Aeroporto de Fiumicino, en Roma. EFE/EPA/TELENEWS
Italia introdujo la obligación a que se sometan a un test de coronavirus a quienes procedan de España, Grecia, Malta y Croacia, pero cumplir esta normativa está resultando difícil, pues aún no se han habilitado los aeropuertos, puertos o estaciones, muchos no reciben información y nadie controla si realmente se realizarán los test.

Los medios de comunicación del país hablan de "caos" a la hora de describir cómo se ha puesto en marcha la ordenanza del ministerio de Sanidad que introdujo los test para quienes regresen de estos cuatro países, considerados de riesgo ante el aumento de los casos internos y al ser lugar de vacaciones de los italianos.

Italia obliga a quienes entren en el país a haber realizado una prueba para detectar el coronavirus 72 horas antes del ingreso o someterse al test en las 48 horas siguientes de su llegada.

Algunos pasajeros llegados este jueves a los principales aeropuertos italianos recibieron un folleto en el que les explicaban que tenían que llamar a los centros de salud de la localidad donde se dirigían para someterse a la prueba y la policía recogía sus datos.

Pero muchos otros turistas o residentes que volvían de sus vacaciones no recibieron ninguna información o número de teléfono al que dirigirse.

Los medios se preguntan si los centros sanitarios, ya desbordados, serán capaces de elaborar las pruebas en tiempo rápido a los turistas, ya que realizan miles de test cada día para los controles normales sobre la difusión del virus.

Por otra parte, los ambulatorios donde llaman los turistas no reciben información en su idioma o aún no han sido informados de cómo gestionar estas pruebas e incluso sugieren que es necesario pagar 69 euros por uno de los test.

Asimismo, se denuncia que cada región está aplicando la ordenanza ministerial de manera diferente y mientras que algunas obligan al aislamiento mientras se espera el resultado de la prueba, otras no lo contemplan.

Por el momento, en los aeropuertos aún no se ha dispuesto ningún tipo de espacio para realizar las pruebas y algunos aseguran que será muy difícil que se puedan practicar por motivos logísticos.

"Es logísticamente impensable", explicó el presidente de la autoridad portuaria Rodolfo Giampieri.