Novagalicia Banco debe vender la mayoría de las 150 empresas que conserva todavía en la cartera de participadas que heredó de las dos cajas gallegas. Y para ello tiene de plazo hasta finales de 2016, según el acuerdo de reestructuración al que llegó con la entrada del FROB (Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria) en el capital. Entre las empresas que forman parte del grupo hay algunas cotizadas como Tecnocom, NH Hoteles, GAM, CLH o Adolfo Domínguez. Pero también otras no cotizadas como Norvento, Transmonbús, Terras Gauda, R, Gas Galicia o Itínere.

El objetivo es llegar a 2017 con una carga mínima de participadas que sean las imprescindibles para la actividad de la entidad, que debe ser la banca minorista en Galicia, por ejemplo podría quedarse con alguna empresa de servicios financieros y otras que tengan que ver con la actividad del banco.

El hecho es que en lo que va de año ya ha vendido participaciones en empresas por un valor de 135 millones de euros, entre ellas el 44,7% del Banco Etcheverría, un 1,94% en la red energética de Portugal REN, su 25% en Luso Galaica de Traviesas, otro 5,05% de Elecnor o su última venta que ha sido el 5,2% de Sacyr.

En total las ventas superan ya los 303 millones de euros que han pasado a las arcas de la entidad.

Sin embargo quedan todavía muchas empresas por vender que en su momento formaron parte de la corporación industrial de las cajas, que supusieron inversiones de directivos como Julio Fernández Gayoso que se han demostrado no siempre certeras y que incluso fueron contrarias a los intereses gallegos. En este sentido, Novagalicia mantiene todavía una participación en del 5,05% en Media Capital, un grupo de medios de comunicación portugués.

De todas formas, el objetivo de Novagalicia es deshacerse de las participadas de forma ordenada y así mantiene un goteo constante de ventas en los últimos meses.