El conseller d'Acció Exterior, Relaciones Institucionales y Transparencia, Bernat Solé, ha enviado una carta al ministro español de Interior, Fernando Grande-Marlaska, a través de la cual manifiesta la necesidad de eliminar el voto rogado, y le hace extensiva un conjunto de propuestas, entre ellas la digitalización del voto exterior (el voto por Internet con descarga de documentación en línea), a fin de contrarrestar la baja participación del electorado residente en el extranjero.

Según Solé, las "particularidades y dificultades que presenta el actual sistema de voto exterior menoscaban la capacidad de la ciudadanía de ejercer este derecho fundamental". Una muestra de los efectos negativos del actual sistema de voto es la caída en el porcentaje de registros en el CERA (el censo electoral de residentes en el extranjero) que ha pasado del 31,74% en 2008 a un 5,75% el 2019, coincidiendo con la aprobación de la reforma LOREG de 2011 y la introducción de la necesidad de orar el voto.

Para hacer frente a los escollos que deben afrontar las personas que quieren votar desde el exterior, además de la eliminación del voto rogado, Solé propone diferentes medidas como la regulación del boleto en blanco, para que los votantes a el exterior puedan escribir directamente su opción de voto sin tener que esperar a recibir los boletos impresas de cada formación política, y la posibilidad de descargar la documentación por Internet. Ambas medidas supondrían un ahorro de tiempo y recursos económicos.

Según Bernat Solé la introducción del voto electrónico también "eliminaría las incidencias para los envíos a través del correo postal".

Asimismo, el consejero expresa su preocupación ante las diferentes incidencias relacionadas con los actuales plazos de gestión de la documentación electoral, así como la obligatoriedad de hacer los trámites de manera presencial en los consulados y la falta de recursos de algunas de las delegaciones consulares.

La carta concluye tratando los aspectos relacionados con los costes de envío de la propaganda electoral a los votantes, tanto los que están en el territorio como los que están fuera. Solé se suma a la demanda hecha por otras instituciones como el Parlamento y el Síndic, así como otros territorios del Estado, que plantean hacer llegar a los votantes la propaganda electoral a través de un envío único, en vez de hacer un por cada partido político. Teniendo en cuenta que son costos que se asumen a través de subvenciones a los partidos políticos o en Correos, la medida implicaría una considerable reducción de gasto público a la vez que reduciría el impacto ambiental.

La noticia completa, carta a Marlaska incluida en: http://exteriors.gencat.cat/ca/detalls/noticia/not_200612_cartavotexerior