19/08/2020
01:21 h.
Las medidas para luchar contra el coronavirus acordadas entre el Gobierno y las comunidades, como el cierre de todo el ocio nocturno y la prohibición de fumar en la calle sin distancia, así como las restricciones aplicadas por el Govern, como prohibir las "party boats", han entrado ya en vigor.
Su cumplimiento es obligatorio desde que el Boletín Oficial de las Islas Baleares (BOIB) ha publicado este martes la resolución de la Conselleria de Salud aplicando las nuevas medidas.
De esta manera, en las islas ya no pueden abrir los locales de ocio nocturno ni se puede fumar en la calle sin una distancia de seguridad de 2 metros, como tampoco están permitidas las fiestas en piscinas y en barcos, ni los entrenamientos deportivos con contacto.
El Govern balear ha adoptado una serie de medidas de refuerzo que se unen a las acordadas con las comunidades autónomas, como son la prohibición de dichas "party boats" y las fiestas que se celebren en piscinas o en instalaciones exteriores de establecimiento hoteleros.
Además, se prohíbe la venta de bebidas alcohólicas en embarcaciones de transporte pasajeros de carácter turístico o recreativo.
En el ámbito deportivo, en las islas se prohíben los entrenamientos deportivos con contacto, tanto federados como aficionados. Solo se permitirán con una distancia interpersonal de 1,5 metros y se evitará el contacto físico en todo momento. Los de equipo serán de un máximo de 30 personas, en pista se limitarán a 20 y los de deportes de contacto a 10 personas.
Asimismo, se aplaza al 1 de octubre (si las condiciones epidemiológicas lo permiten) el comienzo de las ligas federadas, que estaba previsto para el 1 de septiembre. Las federaciones pueden solicitar excepcionalmente la realización antes de una competición, que tendrán un máximo del 75 % del aforo y nunca más de 1.000 personas al aire libre y 300 sentadas en instalaciones cubiertas.
Otra de las medidas adoptadas por el Govern balear es rebajar del 75 % al 50 % el aforo en los centros de culto, además de recomendar que las reuniones familiares y sociales no excedan de 10 personas.
Por último, se impone a los establecimientos la obligación de exponer al público la capacidad máxima y asegurar que esta capacidad y la distancia interpersonal se respetan, así como el horario de apertura, la obligatoriedad de observar la distancia y de usar la mascarilla, en su caso.
Su cumplimiento es obligatorio desde que el Boletín Oficial de las Islas Baleares (BOIB) ha publicado este martes la resolución de la Conselleria de Salud aplicando las nuevas medidas.
De esta manera, en las islas ya no pueden abrir los locales de ocio nocturno ni se puede fumar en la calle sin una distancia de seguridad de 2 metros, como tampoco están permitidas las fiestas en piscinas y en barcos, ni los entrenamientos deportivos con contacto.
El Govern balear ha adoptado una serie de medidas de refuerzo que se unen a las acordadas con las comunidades autónomas, como son la prohibición de dichas "party boats" y las fiestas que se celebren en piscinas o en instalaciones exteriores de establecimiento hoteleros.
Además, se prohíbe la venta de bebidas alcohólicas en embarcaciones de transporte pasajeros de carácter turístico o recreativo.
En el ámbito deportivo, en las islas se prohíben los entrenamientos deportivos con contacto, tanto federados como aficionados. Solo se permitirán con una distancia interpersonal de 1,5 metros y se evitará el contacto físico en todo momento. Los de equipo serán de un máximo de 30 personas, en pista se limitarán a 20 y los de deportes de contacto a 10 personas.
Asimismo, se aplaza al 1 de octubre (si las condiciones epidemiológicas lo permiten) el comienzo de las ligas federadas, que estaba previsto para el 1 de septiembre. Las federaciones pueden solicitar excepcionalmente la realización antes de una competición, que tendrán un máximo del 75 % del aforo y nunca más de 1.000 personas al aire libre y 300 sentadas en instalaciones cubiertas.
Otra de las medidas adoptadas por el Govern balear es rebajar del 75 % al 50 % el aforo en los centros de culto, además de recomendar que las reuniones familiares y sociales no excedan de 10 personas.
Por último, se impone a los establecimientos la obligación de exponer al público la capacidad máxima y asegurar que esta capacidad y la distancia interpersonal se respetan, así como el horario de apertura, la obligatoriedad de observar la distancia y de usar la mascarilla, en su caso.