El PSOE continúa su carrera electoral ascendente en Andalucía, pues de quedarse por debajo de la barrera del 30 % en las elecciones autonómicas y escalar al 34,2 % en las generales, ha logrado casi un 37 % en las municipales, mientras que el PP recupera el segundo puesto que le arrebató Cs el 28 de abril.

Los socialistas han ganado en cuatro de las ocho capitales: Sevilla, Huelva (con mayoría absoluta), Granada y Jaén, aunque en estas dos últimas puede gobernar el bloque de derechas.

El PP ha ganado en Almería, Córdoba y Málaga, y Adelante en Cádiz, donde prácticamente ha doblado el porcentaje de votos.

Francisco de la Torre (PP) ha vuelto a ganar en Málaga capital -como ocurre desde 1995-, pero para conservar la que era hasta ahora su mayor Alcaldía en España vuelve a depender de Ciudadanos (Cs), y el candidato de Adelante Cádiz, José María González, "Kichi", revalida como alcalde rozando la mayoría absoluta.

Por provincias, el PSOE ha ganado en seis: Sevilla (41 %); Córdoba (34,4 %); Jaén (45,5 %); Huelva (44,3 %); Granada (37,2 %), y Cádiz (31,1 %), y los populares en las otras dos provincias, con un 39 % en Almería y un 36,8 por ciento en Málaga.

La tercera formación más votada es Ciudadanos, con un 8 % de los votos, aunque en número de concejales, con 450 (tenía 166), está por detrás de Adelante Andalucía, confluencia de Podemos e IU, que ha cosechado el 7,67 por ciento de apoyos y 521 ediles.

Por su parte, Vox irrumpe en los ayuntamientos andaluces con más de un centenar de concejales, al obtener el 3,27 % de votos.

De los 786 municipios andaluces, el PSOE ha ganado en 690, lo que representa el 80 por ciento del total.

En las municipales de 2015 también ganó el PSOE en Andalucía, pero sólo superó al PP por algo más de cuatro puntos frente a los 10 de diferencia que le ha sacado ahora.

En las generales, el PSOE dobló a Ciudadanos, que quedó como segunda fuerza en número de votos, y al PP, pero la participación fue de doce puntos más.

En poco más de cinco meses y tras la debacle de las autonómicas, que abrieron un nuevo ciclo en Andalucía después de 37 años de gobierno del PSOE, los socialistas han ido recuperando progresivamente los apoyos en esta comunidad.

Aunque la dirección federal del PSOE está firmemente decidida a abordar la "renovación" en la federación andaluza, su actual líder, Susana Díaz, cree que los resultados de las últimas citas electorales le refuerzan.

En los próximos días se verá hasta donde llega la pérdida de poder orgánico de la expresidenta de la Junta, pues la dirección federal tiene la última palabra en las propuestas de nombramiento de los presidentes de diputaciones provinciales. Al igual que ocurrió en las listas al Congreso y el Senado, se prevé que intervenga en las diputaciones.