A lo largo del mes de mayo, que acabamos de despedir, los socios y amigos de la Casa Catalana de Zaragoza, vivieron una de las noches "más emotivas y divertidas desde su nacimiento", tal como ellos mismos nos cuentan.

Y es que dentro de un marco institucional y de hermandad, promovida por el actual Consejo de Directores, se organizó una cena homenaje y despedida, a quien ha sido su presidente durante más de 17 años en Jordi Oriol I Andreu.

Una noche llena de palabras de reconocimiento, gestos cariñosos y de admiración hacia Jordi, por el trabajo hecho y por el respeto que ha fomentado durante todos estos años. "Sin duda este reconocimiento estará  en nuestra memoria para siempre", destacan desde la Casa Catalana de Zaragoza.