La representación de la figura del Apóstol Santiago en la pintura a través del tiempo fue objeto de la conferencia que Matías Díaz-Padrón, doctor en Historia del Arte y conservador del Museo del Prado, ofreció en la Delegación de la Xunta de Galicia en Madrid-Casa de Galicia, “Una visión de Santiago Apóstol en la pintura”. Tuvo lugar dentro del Seminario José Antonio Cimadevila Covelo de Estudios Jacobeos que se desarrolla a lo largo de la semana en colaboración con la Asociación de Amigos de los Caminos de Santiago de Madrid.

Acompañaron al conferenciante, el presidente de la Asociación de Amigos de los Caminos de Santiago de Madrid, José Antonio Ortíz, y el coordinador de Actividades Culturales de la Casa, Ramón Jiménez, quien dio paso a la tercera conferencia del ciclo y resaltó el “buen paso” con el que está marchando esta edición, la decimocuarta, del Seminario.

Ortíz presentó al conferenciante destacando de su extenso currículum, vinculado a la pintura, que se doctoró con la tesis “Pintura Flamenca del siglo XVII en España”, fue conservador jefe de Pintura Flamenca y Holandesa del Museo del Prado y que ha hecho grandes descubrimientos en atribuciones de algunos cuadros a épocas y pintores. En la actualidad es consejero técnico de la dirección del Museo del Prado,  miembro investigador del Consejo Superior de Investigaciones Científicas y director del Centro de Investigación de Pintura Flamenca Institut Moll y tiene más de cuatrocientas publicaciones en revistas científicas nacionales e internacionales.

Díaz-Padrón se sirvió de una seleccionada colección de diapositivas de prestigiosas obras pictóricas para mostrar a los presentes cómo evolucionó la representación de la figura de Santiago en la pintura desde el Románico hasta el siglo XVIII y las sensibilidades con que fue abordada por pintores de España, Francia y Flandes. Entre ellos, Rubens y Rivera, que según el conferenciante “son esenciales”.

Algunas de ellas de obras poco conocidas, en la que se le representa con la Virgen del Pilar, y otras batallando contra los moros. “La figura de Santiago Apóstol alcanza una concepción universal y la pintura responde a la vivencia de ese sentimiento y su presencia en España, en el Camino de Santiago” refirió Díaz-Padrón, quien también aludió a “una explosión en toda la iconografía europea”.