sábado, 20 de abril de 2024

COMPARTIERON CON LA COLECTIVIDAD GALLEGA DE MÉXICO LA CELEBRACIÓN ANUAL DEL PRIMERO DE MAYO

Alfonso Rueda y Antonio Rodríguez Miranda visitaron a la comunidad gallega en México

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El vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda y el secretario xeral da Emigración, Antonio Rodríguez Miranda, participaron en la 'Jira Campestre' del Primero de Mayo, organizada por el Centro Gallego de México en sus instalaciones del Canal de Chalco, en Iztapalapa, en las afueras del Distrito Federal. A la celebración acudieron, como cada año, más de 4.000 personas, convirtiéndola así en una de las citas más relevantes de la agenda anual de la Galleguidad en el mundo. Se trata de una iniciativa ya tradicional del Centro Gallego de México, presidido por Florencio Gulías, y en el que en la actualidad están adscritas más de dos mil familias gallegas. La entidad, con más de un siglo de existencia, es uno de los grandes referentes de la Galleguidad en el mundo por su sostenibilidad social y económica, además de por su carácter de institución formadora y solidaria entre los gallegos y gallegas residentes en el país.

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Antes de la celebración, Alfonso Rueda y Antonio Rodríguez Miranda establecieron contactos previos con la directiva del Centro, visitaron las instalaciones centrales de la entidad, e incluso asistieron como invitados a algunas de las actividades regulares que tienen lugar en el mismo. También mantuvieron ayer un encuentro con la juventud que compone el amplio abanico de grupos folclóricos vinculados a la comunidad. El titular de la Vicepresidencia y el secretario xeral da Emigración también aprovecharon su estadía en la capital azteca para visitar las instalaciones, y entrevistarse con responsables del Hospital Español de México, institución en la que históricamente viene siendo atendida una parte de las colectividades gallega y española, y ahora presidida por el gallego Daniel Suárez.

El Centro Gallego

La sede actual, propiedad de la asociación, es de tipo colonial y fue construida a mediados del pasado siglo, con una superficie de 1.500 m2 en planta y más de 2.500 en obra. Cuenta con una amplia biblioteca, salas y juego y ludoteca, oficinas, y servicios de hostelería, además de un salón social de 600 m2, y salas de juntas. Además de esa sede central, posee un club de campo la unos cuarenta kilómetros de la ciudad de México. Allí dispone de unos cien mil metros cuadrados con amplísimo aparcamiento, piscina olímpica, baños, vestuarios, dos campos de fútbol reglamentarios,  un campo para juveniles, canchas de tenis, voleibol y baloncesto, así como oficinas, salón de baile, ludoteca, servicios de hostelería, sala de billar, capilla y varias áreas verdes. A lo largo del año desarrollan, además de la gran celebración del Primero de Mayo a la que acuden Rueda y Rodríguez Miranda, las romerías del Socio, A Ramallosa, y Sao Benitiño, la Fiesta de Santiago Apóstol, el Baile de Madrinas, el San Martiño, el Entroido, la Posada de Baile, el Baile de Navidad, la Fiesta de Año Nuevo, el Festival de Bellas Artes, Luminaria, y el Festival Infantil, entre otras.

Visita el Hospital Español de México, dirigido por el gallego Daniel Suárez

El vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda y el secretario xeral da Emigración, Antonio Rodríguez Miranda visitaron el Hospital Español de México y se entrevistaron con los responsables de una institución en la que históricamente viene siendo atendida una parte de las colectividades gallega y española, y que ahora preside el gallego Daniel Suárez. El titular de la Vicepresidencia y el secretario xeral da Emigración aprovecharon su estadía en la capital azteca para visitar la entidad sanitaria que está reconocida como uno de los modelos hospitalarios de mayor calidad asistencial y humanitaria en América.

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La 'Jira Campestre' en el Centro Gallego de México

El vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda y el secretario xeral da Emigración, Antonio Rodríguez Miranda, participaron en la 'Jira Campestre' con la que la comunidad gallega en México celebra el Primero de Mayo. Se trata de un evento, organizado por el Centro Gallego de la capital azteca, en el que participan cada año más de 4.000 personas, configurándose como una de las grandes citas anuales de la galleguidad universal. En el encuentro con las y los emigrantes gallegos y gallegas Alfonso Rueda y Rodríguez Miranda tuvieron oportunidad de transmitirles el afecto y admiración de los ciudadanos y las ciudadanas de la Galicia territorial hacia la diáspora en México, una comunidad muy activa y con importante influencia en los ámbitos cultural, social, económico, académico e incluso político. Rueda subrayó en el encuentro “el ejemplo de integración y participación activa y decidida en el desarrollo de la sociedad de recepción que supone la comunidad gallega en México”, y también “la capacidad de los emigrantes gallegos de transmitir el cariño y sentimiento de pertenencia y unión con la Galleguidad universal a las segundas generaciones de gallegos, ya nacidos en la diáspora”. Por su parte, Antonio Rodríguez Miranda destacó en este nuevo viaje a México que “una de las bazas fundamentales de futuro para Galicia es la presencia de importantes comunidades de paisanos en muchos lugares del mundo. Cuidar las segundas generaciones de gallegos, y fomentar su Galleguidad, es nuestro deber moral con ellos y con sus padres y abuelos, pero también con el futuro de nuestra tierra”.

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Con la juventud

Antes de participar en la multitudinaria celebración popular de ayer en las instalaciones que el Centro Gallego de México posee en el Canal de Chalco, en Iztapalapa, en las afueras del Distrito Federal, Rueda y Miranda se entrevistaron con la directiva de la entidad, visitaron las instalaciones de la sede central en la capital, y tuvieron oportunidad de mantener un encuentro con las y los jóvenes que participa en las actividades de la misma. Según Rueda “este encuentro sirvió para comprobar la buena salud de la Galleguidad en la ciudad más poblada de América. Que la juventud gallega de México sienta ese activo compromiso con sus orígenes, muestre ese orgullo por las raíces de sus padres y abuelos, es una oportunidad impagable para abrir, aun más, Galicia al mundo, para aumentar la presencia de nuestra cultura, y de nuestra economía, en un mundo cada vez más globalizado”.