Las aduanas francesas informaron de la aprehensión el 26 de marzo pasado por sus agentes de 1.033.225 euros en billetes escondidos en un coche con matrícula polaca que había entrado desde España por el País Vasco.

La operación, explicó la Dirección General de Aduanas en un comunicado, se llevó a cabo en la localidad de Urrugne, cuando los agentes realizaron un control en un vehículo en el que viajaban dos personas cuya nacionalidad no se precisó.

Un perro especializado en la detección de drogas y que ha sido adiestrado últimamente para distinguir el olor de los billetes fue el que condujo a un registro en profundidad del automóvil.

Se encontraron bolsas con dinero escondidos en los asientos delanteros (368.175 euros) y también fajos de billetes en una caja camuflada tras el parachoques trasero (665.050 euros).

Un portavoz señaló a Efe que "hay muchos indicios" de que el dinero procede de "tráficos fraudulentos".

Las dos personas que iban en el vehículo, inicialmente detenidas por las aduanas, pasaron más tarde a manos de la justicia, que las dejó en libertad balabjo control judicial.