Gracias a la generosidad de nuestro buen amigo Jorge Navós, que durante tantos años fue uno de los mejores colaboradores que ha tenido La Región Internacional, nos enteramos de la mala noticia del fallecimiento del ex presidente del Círculo Social Val Miñor. Jorge Navós escribía en nuestro facebook: "Estimados compañeros de La Región Internacional: lamento comunicar esta triste noticia para nuestra Colectividad: La Comisión Directiva del Círculo Social Val Miñor, lamenta comunicar que en la mañana de hoy, ha dejado de existir nuestro Ex- Presidente Don José Carlos Panteón Fernández. Todos quienes compartimos muchos años de dirigencia junto a él, sabemos de su enorme cariño por nuestra casa y por las distintas instituciones en las que colaboró en forma comprometida dentro de la Colectividad Gallega de Buenos Aires. Desde aqui, elevamos una oración por el eterno descanso de su alma."

Conocida ésta triste  noticia, María González Rouco nos envía entonces una reseña de una de las más recientes comparecencias públicas de Juan Carlos Panteón, del pasado día 4 de diciembre, cuando la FUAGRA le entregó el Reconocimiento al “Gallego del Año 2015” , un acto en el que también se entregó a Leandro Barba Palacios, el del "Joven Gallego 2015", en ambos casos "por el trabajo que vienen desarrollando más allá de sus Instituciones, decisión en la que  ha primado sus esfuerzo en la difusión de la Cultura Gallega por fuera del ámbito institucional, y en la integración y coparticipación de los centros gallegos de la Argentina".

Al recibir dicho premio de manos de José Luis Sangiao Otero, Juan Carlos Panteón manifestó: "Yo no estoy acostumbrado al micrófono. En mis tantos años de actividad, me cuesta un poquito hablar. Me preguntaban cómo se logra. Yo creo que hay que tener vocacion de servicio para llegar a hacer algo en la vida, para llegar a hacer algo en esta colectividad. A traves de los años se va obteniendo el conocimiento y se va desarrollando lo que uno quiere hacer. Como bien dijeron, lo que hace falta es honestidad, honestidad en todo sentido, Trabajando, trabajando y trabajando, y no dejando de trabajar; todo lo demás son cuentos. Que hay problemas, que hay situaciones, que hay inconvenientes, siempre los hay y siempre los va a haber, y nosotros tenemos que seguir adelante y tenemos que seguir peleando. No tenemos que pensar que por un problemita ya estamos derrotados o ya estamos vencidos. Los gallegos no somos asi; somos de tiro fuerte, de poner el lomo, de agacharnos para hacer fuerza, somos de trabajar. Somos como somos. Somos gallegos. Y por tanto, luchemos porque nosotros seamos reconocidos tal cual somos, a través de nuestro trabajo. Nos llevó muchos años en la diáspora, trabajar y que nos sean reconocidos nuestros méritos, y nos va a seguir costando trabajo, pero no dejemos de trabajar. Por favor, no dejemos de trabajar. Somos pocos, cada vez somos menos. Le buscaremos la vuelta y seremos muchos más. Con alguna actividad, con algunos problemas, con alguna cosa como la que hicimos en la Avenida de Mayo, (se refería a Buenos Aires Celebra Galicia...), que fue un espectáculo. Nunca se había visto algo semejante; pudimos hacer todo lo que pudimos hacer. Estoy enormemente complacido y creo que a lo mejor hay gente que lo merece más que yo. Ya va a haber tiempo de reconocerla. Como bien saben ustedes, el "Gallego del Año" no es por este último año sino por su trayectoria. Todo esto que hago e hice es por el apoyo que tengo en mi casa; gracias a mi esposa, que sin ella no creo que hubiera logrado lo que logré, a mis hijos, a mis nietos, una gran familia. Ya dentro de poco vamos a cumplir cincuenta años de casados. Así que creo que gran parte del mérito se lo debo a mi familia; les robé horas de su bienestar. Horas de haber tenido un abuelo, de haber tenido un padre, y eso cuesta, eso cuesta mucho, aunque no se vea, cuesta muchísimo. Así que para ellos todo el mérito; lo que me están otorgando a mi, yo se lo dedico a mi familia. Y también quiero nombrar a gente que está presente haciéndose eco de este galardón, que merecen también ellos, porque muchos años fueron trabajados en Valle Miñor. Le agradezco a todos ellos, le agradezco a la colectividad. Muchas gracias a todos y hasta el año que viene si Dios quiere, peleando, luchando y sirviéndole a todos ustedes".  

Hermosas palabras las de Juan Carlos Panteón que, recuperadas en un momento tan triste aumentan el dolor por la pérdida de un hombre bueno, abnegado y entregado a su familia y a la colectividad.

Descanse en paz y todo nuestro cariño y afecto para sus familiares y amigos.