En el marco de la conmemoración del Año Neus Catalá, la Delegación del Gobierno de Catalunya en Francia y Suiza ha organizado el acto "El olvido de los olvidados, la deportación de los exiliadosrepublicanos", en el que se proyectó el documental de Alain Resnais "Nuit et Brouillard" y que contó también con una conferencia a cargo de la profesora y presidenta de la Amical de Ravensbrück, Anna Sallés.

 El acto, que se ha centró fundamentalmente en la figura Neus Catalá y en todos los catalanes deportados a los campos de exterminio nazis, contó con la participación del delegado del Gobierno en Francia y Suiza, Martí Anglada.

 Martí Anglada, abrió el acto y recordó que "más de 10.000 republicanos españoles fueron enviados a campos de concentración y que, de éstos, sólo 2.184 sobrevivieron; entre ellos, Neus Catalá ".

En su intervención, la historiadora y presidenta de la Amical de Ravensbrück, Anna Sallés, expuso el recorrido político de Neus Catalá desde la II República, su exilio en Francia y su participación en la resistencia durante el régimen de Vichy, y finalmente su lucha dentro del campo de trabajo de Ravensbrück. Sallés quiso hacer hincapié en lo que significó la II República, desde un punto de vista de reforma social y política, y la posterior represión de los sectores de izquierda durante el franquismo. En este sentido, afirmó que "para una gran parte de los deportados, el final de la Segunda Guerra Mundial fue una liberación, pero no lo fue para los republicanos catalanes y españoles, que a pesar del fin de la guerra no podían volver a su país de origen ".

"Bajo el régimen franquista los exiliados eran, de facto, apátridas ya que el régimen retiró la nacionalidad a todos los deportados", agregó Sallés. La historiadora concluyó que "la lucha por la memoria de todas las víctimas del fascismo no sólo debe ser la lucha de una generación, sino de todas, sobre todo la nuestra".

 El acto finalizó con un debate con la participación del público, que ha querido compartir con la historiadora su visión sobre la experiencia de los exiliados y también sobre la cuestión de la memoria histórica. Entre los asistentes había representantes de diversas asociaciones, como la asociación 24 août 1944 y Europe de la Mémoire.