La emigración asturiana y el retorno protagonizan el mensaje de Fin de Año del presidente del Principado, Adrián Barbón, en el que se ha referido a las políticas que aplicará el gobierno en 2024 para afrontar el desafío demográfico y atraer población a una comunidad “ideal para vivir y trabajar”. “Si tiempo atrás fuimos una tierra de emigrantes, pasaremos a ser una Asturias de bienvenida al retorno, que recibirá con los brazos abiertos, recursos y asistencia a quienes deseen volver”, ha afirmado. 

En su mensaje de Nochevieja, Barbón se ha referido al presupuesto autonómico aprobado recientemente y que asciende a 6.348 millones en 2024. Unas cuentas que, según explicó ayudarán a poner en marcha medidas frente "a la pérdida de habitantes", al tiempo que contribuirá a "reducir las listas de espera", a apoyar a quienes "emprendan actividades económicas en el medio rural" y a incrementar "el parque de vivienda pública". 

"Las cuentas no son una tediosa distribución de números ni una mera baza política”, sino el instrumento que permitirá abrir en septiembre de 2024 "las primeras escuelinas autonómicas y ampliar la vía fiscal asturiana con nuevas deducciones y ayudas para las clases medias y trabajadoras", ha afirmado Barbón, quien ha retomado su discurso a favor de la oficialidad de la llingua abogando por “un gran pacto por la conservación y el uso del asturiano y el eonaviego que abra paso a la oficialidad”. 

El jefe del ejecutivo asturiano se ha referido, se ha referido a los retos de este 2024 “Reducir el paro, fortalecer el pulso empresarial, revitalizar el medio rural, mejorar los servicios públicos o encarar el impulso demográfico son preocupaciones constantes de mi gobierno”.  Y finalmente, en clave  nacional, ha reivindicado que Asturias “salga beneficiada” en debates como el referido a la aplicación de una quita a la deuda autonómica y el de la reforma del sistema de financiación. “En nuestro modelo de Estado, único y plural al mismo tiempo, identificado de pleno con la Constitución y los valores que la hicieron posible, no caben la insolidaridad ni la desigualdad”, ha advertido.